Es el cuarto libro de la serie de Harry Potter, escrito por J.K. Rowling y publicado en el 2000 con el título de: “Harry Potter y el cáliz de fuego”. Recibió el Premio Hugo a la mejor novela en el año 2001. En el año 2005 se realizó la película basada en el libro y dirigida por el director Mike Newell.
Este cuarto libro, de mayor extensión que los anteriores, dará para muchas historias y muchas sorpresas, todas ellas muy interesantes.
Supone un punto de inflexión en la serie, los niños ya han dejado de serlo y se tendrán que enfrentar a situaciones de la vida real: el primer amor, los celos, la lealtad, la fama, el compañerismo. Muchas experiencias que harán que nuestros protagonistas maduren y vayan convirtiéndose en adolescentes, perdiendo parte de su inocencia. Algo que ya se había iniciado en el tercer libro: “Harry Potter y el prisionero de Azkaban”.
Habrá un hecho que ocurrirá en este cuarto libro y el cuál la escritora anunció a los fans antes de que se publicara, que cambiará la forma de pensar y de ver las cosas de los protagonistas, y se darán cuenta de que la vida no es un juego, las acciones tienen consecuencias que a veces no se pueden reparar.
Otro hecho a destacar para los seguidores de la saga, es el homenaje que rinde la escritora a una niña enferma de leucemia, convirtiéndola en alumna de Hogwarts cuando el sombreo seleccionador dice su nombre: McDonald, Natalie y la coloca en Gryffindor, siendo el primer nombre real que aparece en la saga.
Harry Potter, tiene ya 14 años, ha pasado su cumpleaños y está esperando que termine el verano para volver al colegio y dejar atrás Privet Drive y a sus odiosos tíos y primo.
Su estancia se acorta pues es invitado a pasar el final del verano con los Weasley, algo que le hace muy feliz.
Una vez en el colegio, les esperará una agradable sorpresa, este año tendrá lugar “El torneo de los tres magos”, un torneo que fue creado como una competición amistosa en la que participaban las tres escuelas de magia más importantes de Europa: Hogwarts, Beauxbatons y Durmstrang, teniendo cada una de ellas un representante, así mientras los alumnos asisten a sus clases como cada año, tendrán lugar tres pruebas para elegir a un campeón, estas pruebas aportarán mucho dinamismo al libro. Además durante ese tiempo los alumnos convivirán en los terrenos de Hogwarts con “sus invitados” favoreciendo la amistad, la tolerancia y el conocimiento de otros jóvenes magos y sus diferentes culturas, una nueva experiencia que hará crecer a nuestros protagonistas.
Habrá algún personaje nuevo que como siempre mantendrá la intriga hasta el final y varias sorpresas, alguna inesperada, que te mantendrán enganchado a la lectura y expectante a lo que ocurra en cada capítulo.
Estamos ante el primer libro de la serie cuyo final es más abierto respecto de los anteriores, manteniendo la intriga por saber dónde nos llevará la historia después de todo lo que ha pasado y deseando encadenar la lectura del quinto libro, para poder descubrir que les espera a nuestros protagonistas en el quinto año en Hogwarts.