Nocturna Ediciones || Octubre 2017
437 páginas || Papel
Comprar Libro
«En Las Vegas, el tiempo se congela entre fiestas y casinos».
Y por eso no es sorprendente que MEREDITH vaya a ir, aunque sí que lo es su propuesta. AVA no puede dejar de pensar que ahí hay algo extraño, por más que CONNOR intente tranquilizarla y que LILY no desconfíe porque lo único que quiere es no pensar en TOM ni FINN ni XIMENA ni JASMINE, puesto que lo que ha pasado es horrible, atroz, y ¿por qué OLIVER no puede limitarse a desaparecer de su vida, como parecen haberlo hecho MARTHA y REX? NATE, sin embargo, diría que las personas desaparecen demasiado rápido en comparación con la huella que dejan. ¿O acaso no es así, JORDAN?
Pasar el invierno en Las Vegas podría ser una buena forma de distanciarse. Pero cuidado: en una ciudad donde todo el mundo lleva máscaras, la de alguno puede acabar eclipsando su verdadero rostro.
RESEÑA 1ª PARTE
*Esta reseña contiene spoilers de la 1ª parte (en el primer párrafo)
Hacer esta reseña sin comentar lo que ocurrió en la primera parte, es prácticamente imposible. Por eso os aconsejo que si no habéis leido 'Otoño en Londres' vayáis con cuidado leyendo esta, o mejor, no la leáis (sobre todo el párrafo siguiente).
'Invierno en Las Vegas' empieza justo donde termina el anterior. Con ese desastre en el avión que lleva a Tom, Jasmine y Finn de viaje. Ninguno sabe que ha ocurrido con ellos, y el aeropuerto se transforma en un lugar de encuentro para las familias, y para Lily, que en cuanto se entera de la noticia no duda en ir a ver si Tom está bien, a pesar de como acabaron, y de que desde entonces, no han vuelto a hablar. El único que no se encuentra allí es Nate, porque está viajando con el padre de Finn, y para desgracia de ambos, no llegan a tiempo de saber las noticias cara a cara. Y el golpe que todos viven es muy duro, así que tendrán que intentar superarlo y seguir adelante, pero no será fácil.
Esta 2ª parte ha sido algo rara... al menos para mi. Dejamos a un lado el romance, el tono juvenil de la historia, las aventuras de esos chicos universitarios y el día a día de su vida en el hotel Ellesmere, para vivir con ellos una aventura, para embarcarnos en una especie de thriller en el que nada es lo que parece y no sabes que más les puede ocurrir, y viajar junto a alguno de los protagonistas a Las Vegas. Si de Otoño en Londres dije que tenía una trama sencilla, en la que ocurría todo lo que a un universitario le podría ocurrir, este es todo lo contrario. De sencillo tiene poco, y las cosas que ocurren son, algunas, bastante surrealistas. Al menos para lo que una vida normal se podría esperar. Y no es que no me haya gustado, porque me encantan los thrillers y los libros de misterios, venganzas y traiciones, pero no me lo esperaba, y por eso al leerlo, la sensación ha sido muy rara. No mala, pero si rara.
Creo que con este libro Andrea ha querido ir un paso más allá, y no negaré que lo ha conseguido, porque ha demostrado que puede escribir algo más a parte de una historia juvenil, pero debo reconocer que a mi lo que me conquistó de Otoño en Londres, o parte de lo que me conquistó, fue esa sencillez a la hora de escribir la historia, esas cosas más normales con las que podíamos sentirnos identificados, y que, en este libro, a pesar de que sigue habiendo algunas de ellas, nos las encontramos en menor medida. O quizá no es que haya menos, sino que la otra parte de la historia, la del suspense, el drama, y los sucesos extraños, pesan mucho más. Y como digo me ha gustado, pero quizá me ha pillado desprevenida porque no tenía ni idea de lo que iba a ocurrir. Y no penséis que con sucesos extraños habló de fantasmas que no, no va por ahí la cosa. Con extraños me refiero a nuevos personajes, mucho más drama, e historias personales bastante más rebuscadas e inesperadas.
Pero bueno, a parte de todo eso que no me esperaba, siguen estando los mismos personajes, con sus problemas, sus emociones, sus sentimientos, y esa sensación en ocasiones de no saber que hacer con su vida. Mis favoritos siguen siendo los mismos: Tom, Lily, Ava y Connor. Y además de odiar a Oliver como ya lo odiaba, porque sigue dando por saco, se añade a la lista Meredith, sin duda alguna. Si Andrea pretende que se les odie y se les deseé mucho mal... lo consigue, que no tenga duda.
La manera de escribir de Andrea, me sigue encantando. Sigue sabiendo como transmitir lo que sienten los personajes en todo momento, sabiendo ponerse en la piel de cada uno cuando toca, y eso me encanta. Porque son muchos personajes y muy diferentes y en ningún momento tenemos duda de quién es quién, por cómo actúan, como piensan o lo que sienten. Y eso me encanta, y me parece que tiene mucho mérito. Sigue siendo un libro escrito de un modo juvenil, para que podamos entender lo que nos cuenta sin dificultad, lo que hace que la lectura sea de nuevo ligera y amena. Aunque en esta ocasión nos dejé con la boca abierta en varios momentos, y con esa sensación de tener que volver a leer lo escrito para asegurarnos de que estamos leyendo bien. Y es que pasan muchas cosas que asombran, que no te esperas, y que te dejan alucinanda. Sobre todo el final... Si Otoño en Londres terminó de una manera que nos dejaba a todos descolocados y sufriendo, este no se queda atrás. ¡Ya te vale Andrea! 😖🙈
En resumen, 'Invierno en Las Vegas' es una continuación que sabe cómo sorprender al lector con sucesos nuevos e inquietantes, de esos que te dejan alucinado y sin saber muy bien cómo reaccionar. Es un libro que continúa la historia de los chicos del Ellesmere (y sus conocidos), justo por donde terminó el anterior, y que de nuevo nos trae sentimientos, emociones, drama y salseo, ese que tanto le gusta a la autora. Pero además, da una vuelta de tuerca a la historia convirtiéndola en algo menos juvenil y más thriller que aunque me ha gustado, me ha pillado tan desprevenida que ha conseguido que disfrute el libro un poquito menos que el anterior. Pero que sin duda, me ha dejado loca por seguir con el 3º, que espero que salga muy, muy pronto. Os gustará si os gustó Otoño en Londres, y si os gustan las historias que esconden secretos entre sus páginas... Y entre sus personajes.
Supongo que nos concentramos tanto en nuestro temor a la muerte que acabamos subestimando la vida. Nadie se acuerda de ella hasta que sentimos cómo se desliza entre nuestros dedos como una corriente incontrolable de agua. En este mundo importa tanto el presente que olvidamos que nuestra meta es desaparecer. Para algunos, de forma progresiva; para otros, súbita.
Gracias a la editorial por el ejemplar.