Tu vecina te dijo que preferiría que no llevaras a tu bebé de seis meses a la cena. No es nada personal, simplemente no soporta sus llantos.
Tu marido estaba de acuerdo. Después de todo, vivís en la casa de al lado. Podíais llevaros el monitor infantil y turnaros para pasar a verla cada media hora.
Tu hija dormía cuando fuiste a comprobar por última vez. Sin embargo, en este momento, mientras subes corriendo las escaleras hasta su habitación envuelta en un absoluto silencio, confirmas que tu peor pesadilla se ha hecho realidad: ha desaparecido.
Nunca antes habías tenido que llamar a la policía. Ahora están en tu casa y quién sabe lo que pueden llegar a descubrir.¿De qué serías capaz cuando has sobrepasado tus límites?
OPINIÓN
Tenía muchísimas ganas de leer esta novela en cuanto la descubrí y leí la sinopsis. Además, llevaba mucho tiempo sin leer un thriller psicológico y esta novela parecía ser una muy buena opción, pero claro... no estaba leyendo muy buenas opiniones desde que se publicó el mes pasado y eso hizo que disminuyesen mis ganas por leerlo. Aun así, decidí correr el riesgo y me animé a leerla de una vez por todas, sobre todo porque Leyre me animó a hacerlo después de lo mucho que a ella le había gustado. ¡Y menos mal que le hice caso, porque menuda sorpresa me he llevado! *-*
La novela se nos presenta narrada en tercera persona desde el punto de vista de Anne, nuestra protagonista, aunque a menudo encontraremos el punto de vista de personajes tan importantes como Marco (el marido de Anne), Alice y Richard (los padres de Anne) o el inspector Rasbach. Esto nos ofrece una visión mucho más amplia de todo cuanto acontece en la novela y, además, nos permite conocer mucho más y mejor a los personajes.
Todo empieza con una inocente cena en casa de Cynthia y Graham, la pareja de al lado. Al ser una cena de adultos, Anne y Marco no pueden llevar a su hija porque los vecinos no podrían soportar sus llantos. A pesar de todo, acceden a dejarla dormida en su cuna y se llevan el monitor infantil a casa de sus vecinos y se turnan cada media hora para ir a ver cómo está Cora. Pero tras la cena, al volver a casa, se dan cuenta de que la puerta principal está abierta y de que la cuna de su hija está vacía.
¿Cómo y cuándo ha podido desaparecer Cora si sus propios padres pasaban a vigilarla cada media hora? Es más... ¿qué tipo de padres se van a una cena con los vecinos dejando a su bebé solo en casa? ¿Son Anne y Marco buenos padres? Estas y otras preguntas son las que me fueron rondando a medida que pasaba las páginas de esta novela que tantas horas de entretenimiento me ha regalado.
Los personajes secundarios que intervienen en la novela son casi tan relevantes como la propia protagonista. Entre ellos destacaría a los ya mencionados aunque, de entre todos ellos, me quedo con Marco (el marido de Anne), Richard (el padre de Anne) y el inspector Rasbach.
Esta es una de esas novelas en la que los personajes juegan un papel importante y decisivo para el desarrollo de la trama, de tal forma que se hace imprescindible conocerles bien para saber hacia dónde se dirigen y os aseguro que «En la pareja de al lado» así ocurre. He llegado a conocer muy bien a la pareja protagonista y a los padres de ella, aunque reconozco que me hubiese gustado conocer más a la madre de Anne y a la pareja vecina porque seguro que habrían dado bastante juego y creo que tenían mucho que contar.
Aun así no puedo quejarme porque en lo que a personajes se refiere he quedado muy satisfecha. Estamos ante unos personajes muy bien perfilados y trabajados y, sobre todo, variados. Cada uno actúa de una determinada manera según sus propios intereses y por unos motivos u otros siempre están en el ojo del huracán. Siempre he dicho que me encantan las novelas en las que el autor juega con el lector haciéndole sospechar de todos y cada uno de los personajes donde hasta el más irrelevante puede llegar a ser clave. Y he llegado a empatizar con unos y odiar a otros, aunque no diré nombres para no hacer spoilers y chafar el factor sorpresa jiji
En lo que a trama se refiere también he quedado más que satisfecha. Esperaba encontrarme una trama tan predecible, lenta, aburrida y monótona como había leído en muchas de las reseñas que me he ido encontrando, pero lo cierto es que a mí no me ha parecido nada de eso.
Desde la primera página he encontrado una trama llena de suspense e intriga, con muchos secretos ocultos deseando descubrir y un par de subtramas bien definidas la mar de interesantes que no hacen sombra a la trama principal. Si bien es cierto que la novela no destaca precisamente por sus grandes dosis de acción, debo reconocer que a mí me ha mantenido enganchada de principio a fin, pues tenía la necesidad constante de saber qué pasaría a continuación, qué pasos darían los personajes, qué otras sorpresas me tenía guardadas la autora... ¡quería saber más! *-*
"Marco la convenció de que con el monitor encendido en la casa de al lado podrían oír al bebé si en algún momento se movía o se despertaba. Irían a controlar cada media hora. Nada malo podía ocurrir".
Hacia la página 90 más o menos me sentí decepcionada porque se descubre el pastel; se descubre quién orquestó todo y por qué. Demasiado pronto para saberlo si tenemos en cuenta que la novela tiene casi 400 páginas, ¿verdad? Entonces... ¿qué gracia tenía seguir leyendo si ya estaba todo resuelto? Pues no. No estaba todo resuelto y obviamente no lo sabía todo. A partir de ese momento la trama fue adquiriendo una mayor complejidad y todo se fue enredando de tal manera que parecía no tener fin.
Y no sabéis cuánto he disfrutado de esta novela, sobre todo en aquellos momentos en que la autora introducía giros argumentales que no me esperaba en absoluto y que me dejaron boquiabierta. Eso, obviamente, avivó aún más mis ganas por seguir leyendo y desapareció completamente esa sensación de decepción del principio.
Así que sí, para mí la trama no ha sido predecible, lenta, aburrida ni monótona. Ha superado con creces mis expectativas y me he visto completamente enganchada. Fijaos si me ha enganchado la novela que yo, que suelo leer un par de horas por la tarde, sumé a esas dos horas de la tarde otras dos más por la noche y la novela me duró mucho menos de lo que esperaba.
La pluma de la autora no es nada destacable, la verdad sea dicha, sino que es más bien normalita: sencilla, directa y sin medias tintas. Recurre mucho al diálogo, cosa que me gusta muchísimo porque me facilita y agiliza mucho la lectura, y sabe manejar muy bien los tiempos en lo que a suspense y giros se refiere, así que me doy por satisfecha. Y de los demás aspectos ya os he hablado demasiado, así que no quiero repetirme :')
El final fue increíble e impactante, así os lo digo. Es cierto que me hubiese encantado que tuviese algunas páginas más para resolver un par de cosillas que quedan en el aire, pero por lo demás me encantó. Se atan cabos, todo queda bien explicado y hay sorpresas y giros hasta el mismo final, así que no podía dejarme con una mejor sensación. Si os llama la atención esta novela, dejad a un lado las opiniones que hayáis podido leer/escuchar y dadle una oportunidad, que merece la pena ^-^
PUNTUACIÓN/5
Y vosotros,¿habéis leído esta novela? ¿Os gustaría leerla? Contadme :)¡Nos leemos en la próxima entrada!¡Un saludo!