LA REVOLUCIÓN FEMINISTA GEEK
Título: La Revolución Feminista Geek.
Autora: Kameron Hurley (Battle Ground, Washington 1980), residente actualmente en Ohio, Graduada en Estudios Históricos por la Universidad de Alaska y la Universidad de KwaZulu-Natal, se ha especializado en la historia de los movimientos de resistencia sudafricanos. Colabora con Locus, The Atlantic y Tor.com. Su artículo Siempre hemos luchado, incluido en esta colección, fue el primer texto de no ficción en obtener el premio Hugo. Es autora además de la novela Las estrellas de la legión, de las trilogías The Bel Dame Apocrypha (compuesta por God´s War, Infidel y Rapture), Worldbreaker Saga (compuesta por The Mirror Empire, Empire Ascendant, y The Broken Heavens) y de más de una decena de novelas cortas. La Revolución Feminista Geek es una colección de todas sus reflexiones sobre feminismo, cultura, redes sociales, el mundo de los videojuegos o el género de la ciencia ficción entre otros.
Editorial: Runas (Sello de Alianza Editorial).
Idioma: inglés.
Traductor: Alexander Páez García.
Sinopsis: La Revolución Feminista Geek es una colección de esnayos de Kameron Hurley sobre feminismo, la cultura, experiencias personales, las relaciones de poder o de las redes sociales. Comprende numerosas entradas de su blog, así como ensayos escritos específicamente para este libro. Con un estilo beligerante y directo, al tiempo que cuidadosamente elaborado, reflexiona sobre cuestiones como la lucha contra la invisibilización de las mujeres, la perseverancia necesaria para progresar como escritora, la importancia del cambio cultural...Que encuentran eco en muchas personas, interesadas o no e la cultura geek. Su escritura elocente, provocadora y brutalmente honesta, es universal.
Su lectura me ha parecido: honesta, crítica, necesaria, sin concesión alguna, inspiradora, revolucionaria, instructiva, enriquecedora, totalmente imprescindible...Queridísimas lectoras y lectores, en el título del libro que hoy tengo el honor de reseñar contiene una palabra, "geek", cuyo significado para mi era totalmente desconocido hasta ahora. "Geek" viene a ser a grandes rasgos un término que se utiliza para referirse a la persona fascinada principalmente por la tecnología y la informática. El desarrollo del término no ha sido igual en todos los ámbitos y culturas, aunque sí ha se mantenido asociada la palabra "friki" (más conocida por el común de los mortales) como sinónimo. Antes la palabra "geek" se usaba de forma despectiva y asociándola o bien con ciertos objetos (ordenador, videojuegos...) o bien con una serie de adjetivos muy concretos (perdedora/or, asocial, solitaria/o, perdedora/or, impersonal...). Las personas "geeks" suelen ser creativas, hasta el punto de convertirse en los creadores de sus propias áreas de interés. Por ejemplo, si son amantes de los cómics, no dudan en dibujar y guionizar sus propias historietas. Si les apasionan los videojuegos, suelen crear y difundir sus propios juegos de computadora o lanzarse a elaborar teorías sobre sus personajes favoritos. Lo mismo sucede en el ámbito del cine, la televisión o la literatura. El "geek" hace un uso intensivo de las nuevas tecnologías, convirtiendo a internet en el medio de expresión cultural e intercambio de gustos, aficiones y opiniones sobre los temas que les apasionan. Y para acabar, según lo que he podido leer, la o él que se define como "geek" siente especial atracción por la ciencia ficción (ya sea televisiva, literaria o cinematográfica), llegando a convertir a algunas creaciones audiovisuales (Star Wars, Star Trek, Back to the Future, Matrix, Blade Runner o las series Lost, Alias, Heroes entre otras) y del mundo del libro (Farenheit 451, Yo Robot, gran parte de las novelas de Stanislaw Lem...) en auténticos iconos que sobreviven al paso del tiempo. Pero como todo en esta vida, ni estas características generales se cumplen a rajatabla (pues cada persona es un mundo y dentro de la cultura "geek" también) ni este ámbito se libra de sufrir la lacra del machismo más peligroso y que actúa con total impunidad. De esto y más se habla en el que, por méritos propios, se acaba de convertir en uno de los mejores textos de no ficción que he leído en lo que llevamos de año. Un libro que espero que trascienda y que sean muchos, identificados o no con el ámbito en el que se desarrolla, los que lo lean y recomienden con fervor. La Revolución Feminista Geek: la reivindicación de la mujer geek.
La historia de como La Revolución Feminista Geek llegó a mis manos es bien sencilla. Aunque para ser más justa, debería empezar este apartado confesando que jamás había oído hablar del mundo "geek", pero si del "friki", que en siempre se presenta, como he comentado en el primer párrafo, como el sinónimo más extendido. Cuando era más joven, durante mi adolescencia, la palabra "friki" se usaba para describir a ese minúsculo grupo (formado por chicos en su totalidad) que no se amoldaban a los gustos mayoritarios del resto. De hecho, se podría decir que mi mejor amiga de por aquel entonces (actualmente vinculada al mundo del diseño de videojuegos) y una servidora pertenecíamos a él, siendo ella la que más aficiones y gustos sobre el mundo del entretenimiento virtual compartía con el resto. Los videojuegos, las novelas de fantasía, el manga, los cómics de súper héroes...Todos temas para mi desconocidos y que en algunos casos, como el de los videojuegos por ejemplo, me gustaban más bien poco. No obstante, en cuanto me pongo a pensar en aquellos recuerdos de adolescencia me doy cuenta de que sólo éramos dos (o tres a veces) chicas respecto a más de cinco tíos hablando sobre estos temas. Y sólo ahora me percato de lo poco representada que me sentía con algunos de aquellos productos de discusión y disfrute. No me sentía desplazada, al contrario, pero si una especie de bicho raro entre los dos polos opuestos de aquel momento, entre lo convencional y lo extravagante, o lo que la gente definía cruelmente como "estúpido". Superé el instituto, el bachillerato y la universidad sin que me gustasen los videojuegos y los mangas; y no por ello me sentí mal. Sin embargo, no fue hasta mi ingreso en los estudios superiores cuando me percaté que lo "friki" se había puesto de moda, o al menos, se había dejado de ver como algo peyorativo. Gente que nunca me imaginé perteneciente a la llamada "cultura friki" comenzó a ver series como Juego de Tronos, leer con fervor a H.G. Wells o a vestir camisetas con el casco de Darth Vader o el logo de Superman impreso en ellas. Si antes era motivo de burla, en ese momento todos se definían frikis argumentando ser una apasionada/do de un tema en concreto, incluso si este excedía del universo friki. Una tónica que continua hasta nuestros días y que se ha visto reforzada gracias en particular a la serie televisiva The Big Bang Theory, en la que se cumple a rajatabla el estereotipo del friki y que ha conseguido conectar con el público especialmente gracias a esa exageración no tan alejada de la realidad del hombre geek. Y si, digo hombre, porque las mujeres que aparecen en la serie no lo son, por lo que en el fondo la serie parece mostrar un modelo patriarcal geek: hombre, blanco, con gran inteligencia, apasionado de las nuevas tecnologías y con un punto antisocial. Un modelo en el que posiblemente muchos hombres geeks se hayan podido ver reflejados, y que por el contrario, no encontramos a la mujer representada en el universo geek. Es en este contexto, en el que me he ido interesando por la figura de la mujer en la ficción, apareció ante mis ojos el presente libro, La Revolución Feminista Geek. En un primer momento dudé en darle una oportunidad, pues como no estaba muy familiarizada con el mundo geek, pensé que no lo disfrutaría tanto. Craso error, pues el libro de Hurley duró días en mis manos, jornadas en las que me adentré en un mundo para mi desconocido y que ahora miro con otros ojos.
Centrándonos en la reseña propiamente dicha, comenzaremos apuntando que La Revolución Feminista Geek presenta una lectura potente, directa y sin concesiones de ningún tipo. Su sinceridad es abrumadora, al igual que si ingenio para captar la atención del lector a través de la ironía, una ironía muy fina y que solo hace acto de presencia cuando toca, pues para hablar de temas serios, Hurley no tiene problema en cambiar el tono y hacer que el lector pase de esa media sonrisa a la estupefacción. Y es que en La Revolución Feminista Geek se tocan muchos temas, algunos de ellos bastante impactantes y que como lectores en un mundo cada vez más conectado los tenemos que conocer y sin filtro alguno. Antes de pasar a analizar en profundidad el libro, es importante comentar que La Revolución Feminista Geek es una colección de breves ensayos (37 en total), la mayoría de ellos extraídos de su blog, otros escritos expresamente para la publicación de este volumen y uno de ellos (titulado Siempre hemos luchado: cuestionando la narración de "mujeres, ganado y esclavos") merecedor en el año 2013 del Premio Hugo siendo éste el primer texto de no ficción en ganar el prestigioso galardón. Que no os asuste el hecho de que no sea novela. Ya sé que Kameron Hurley nos tiene más acostumbrados a la ficción que al ensayo, pero creedme cuando os digo que éste libro merece, y más en la actualidad, nuestros cinco sentidos puestos sobre él. La Revolución Feminista Geek se divide en cuatro capítulos perfectamente diferenciados. El primero de ellos, "Subir de nivel", está dedicado al trabajo del escritora/or y a la ardua tarea de escribir un texto, ya sea de ficción o de no ficción. Hurley habla sin tapujos de los problemas a los que la o el aspirante a novelista se tiene que enfrentar (falta de inspiración, bloqueo, presión social, horarios de trabajo, invisibilidad, falta de apoyo, menosprecios hacia el oficio...) y define a la escritura como una carrera de fondo. El que la autora/or vea publicado su primer escrito es un triunfo, sí, pero también el inicio de una incansable lucha contra todo tipo de situaciones que pueden acabar minando la autoestima y la determinación de cualquier escritora. Pues claro está, si eres mujer y escribes ciencia ficción, todavía es más difícil triunfar o por lo menos que los lectores sepan de ti y de tu obra que si eres hombre y escribes ciencia ficción. A lo largo de este capítulo, como escritora, me he visto bastante reflejada en algunos apartados, sobre todo por el sentimiento de culpa que a veces me entra cuando veo que mi trabajo no está bien visto por la gente, haciéndote sentir que estás perdiendo el tiempo. En el segundo, "Geek", ha sido sin duda la parte más instructiva y que como lectora más he disfrutado, pues Hurley se extiende analizando la representación de la mujer y los problemas de género en la ficción literaria y audiovisual. Los análisis que hace sobre True Detective y Mad Max: Furia en la Carretera son de lo mejor del libro en general. Estos ejemplos le sirven a la autora como excusa para reflexionar sobre el tipo de ficción que estamos consumiendo y el poder de ésta para cambiar el actual "statu quo" en el que lo masculino se impone sobre lo femenino. En el tercero, "En lo personal", haciendo honor al título del capítulo, Hurley se adentra en el terreno más íntimo para hablarnos de las experiencias que a ella le han marcado como escritora de ciencia ficción. Esta es la parte más emocionante del libro, pues algunas de sus historias destacan por su dureza. Su primera y tóxica relación sentimental siendo adolescente, el acoso sufrido por los integrantes del "gamer gate" a través de internet o la vez que estuvo a punto de morir con veintipocos años de edad tras pasar dos días en coma. Hay quien dice que los escritores se inspiran en su propia biografía para poder escribir, pero en el caso de Kameron Hurley, tendría más sentido decir que la vida, y sus vicisitudes, te forja como escritora. Y por último, el cuarto capítulo, "Revolución", a modo de conclusión Hurley expone de forma contundente que somos nosotros los que debemos enfrentarnos al racismo, al machismo, al acoso o a la censura. Como por su puesto, no tolerar actos tan despreciables como el secuestro del Premio Hugo de novela que tuvo lugar hace un par de años por parte de los trolls del "Gamergate". Una vez desgranado uno a uno cada apartado del libro sólo me queda deciros, pediros y rogaros que lo leáis. Da lo mismo, es perfecto tanto para personas que conocen en profundidad la cultura geek como para quienes como yo es la primera vez que nos adentramos en este tema. Habla de temas muy necesarios y que merecen una reflexión por parte del lector, además de ofrecer una panorámica novedosa de lo geek y todo lo que le envuelve. Todos lo pueden llegar a entender y a amar, pues libros como el de Kameron Hurley hay pocos por desgracia en este mundo.
A lo largo de La Revolución Feminista Geek Hurley lanza a los lectores varios mensajes que no deben caer en saco roto y que hoy, porque sí y porque me da la gana, me dispongo a plasmar en este último párrafo dedicado al debate y a la opinión crítica. En primer lugar, algo que puede parecernos obvio: no rendirse. Toda escritora, pues a ellas principalmente se refiere en este ensayo, debe ser constante y disciplinada en el proceso de creación literaria, sin olvidar disfrutar durante las semanas, meses o años que dure la escritura de un libro. Sin embargo, Hurley denuncia las diferentes vicisitudes a las que la mujer escritora debe enfrentarse tanto en su día a día como en el terreno profesional. Y de entre todas ellas, la invisibilidad, parece ser la más peligrosa. El machismo sigue instaurado entorno a ellas, a las mujeres escritoras, un machismo que difunde prejuicios y estereotipos que por desgracia consiguen calar hondo y que promueve esa temida invisibilidad. Una discriminación que en géneros literarios como los de la ciencia ficción, en el que Hurley se mueve como pez en el agua, es tal vez más notable, pues tradicionalmente ha sido monopolio de los autores, no de las autoras. Es muy revelador ese desglose que la autora hace, citando a la escritora de ciencia ficción Joanna Russ, en relación al canon de prejuicios relacionados con la mujer escritora: "Ella no lo hizo", "ella lo escribió pero no debería haberlo hecho", "lo escribió pero fíjate sobre qué escribió", "lo escribió pero solo escribió uno", "lo escribió pero la ayudaron", "lo escribió pero es una anomalía"...Frases que nos escandalizan cuando las leemos pero que se escuchan y se pronuncian en los círculos literarios e intelectuales más de lo que podamos imaginar. En segundo lugar, un cambio urgente en el tratamiento del género femenino en el mundo audiovisual y literario, principalmente en series, películas y novelas. Mujeres floreros, víctimas, principio de pitufina, la señora personaje masculino, damiselas en apuros, la hipersexualización...Toda una serie de patrones de eje patriarcal que tanto hombres como mujeres consumen de forma continua, aunque evidentemente éstos están dirigidos especialmente al público masculino. Incluso a día de hoy es difícil que una mujer consiga identificarse con los personajes femeninos de las series, cómics o películas del universo geek. Por ello, y aprovechando el inmenso poder amplificador de estos productos audiovisuales y literarios, Hurley aboga por una transformación, un cambio en el paradigma, o dicho de otro modo, presentar modelos femeninos alejados de la construcción patriarcal. Hurley no llama al boicot, sino al cambio, porque el pasado no se puede cambiar, en cambio el futuro todavía está por decidir. En tercer lugar, algo fundamental: atesorar cada experiencia vivida como mujer y como persona en esta sociedad. Cada recuerdo, cada vivencia, cada palabra...Todo puede constituir el germen de una buena historia y formar como escritora, incluso los malos momentos. En este sentido, Hurley se explaya hablando de los trolls del llamado "Gamergate" y de su particular campaña de acoso hacia mujeres relacionadas con el mundo del videojuego, la novela de ciencia ficción y demás ámbitos de la cultura geek que o bien formaban parte de ella con orgullo o bien alzaban la voz para denunciar el machismo en sus respectivas industrias. Unos ataques que se elevaron de tono, hasta el punto de que algunas mujeres llegaron a recibir amenazas muy específicas y en algunos casos provocar la muerte (el mes pasado saltó la noticia del suicidio de la desarrolladora de videojuegos Chole Sagal a causa del terrible acoso perpetrado por los integrantes del portal). El Gamergate, un problema que no ocupa titulares, del que no hablan en la televisión, que la mayoría de personas desconoce, pero que está ahí y no duda en resurgir cada vez que una mujer publica un libro de ciencia ficción o se atreve a hablar de feminizar la industria del videojuego. Y en cuarto y último lugar, Hurley insta a la revolución. Un movimiento a pequeña y gran escala, desde las personas anónimas hasta las que tienen el privilegio de tener todos los días un altavoz. Un cambio que sólo nosotros como sociedad podemos llevar a cabo para conseguir que el machismo, el racismo, la homofobia o la censura sean erradicados de todos los ámbitos. Hace una semana tuvo lugar el Celsius 232 en la ciudad asturiana de Avilés, el mayor festival de literatura de ciencia ficción, terror y fantasía de España. Una edición marcada por la presencia de un gran número de escritoras (algunas de ellas de extraordinaria juventud) en las presentaciones, conferencias, firmas y talleres realizados durante la semana que duró el festival. Escritoras que no dudaron en inmortalizar su asistencia en la foto que precede a este párrafo, a los pies de la catedral de Avilés y posando con sus respectivas obras. En la fotografía aparece Kameron Hurley (autora de este ensayo) y Elisabetta Gnone (autora de las WITCH y de Fairy Oak) como las escritoras estrella de la edición. Sin embargo, en la foto aparecen un buen puñado de autoras españolas consolidadas en los ya nombrados géneros literarios como Elia Barceló, Sofía Rehi o Geòrgia Costa (la mitad del productivo dúo literario que forma con Fer Alcalá). Así como escritoras jovencísimas y llenas de talento como Marta Álvarez, Patricia García Ferrer, Laura Tárraga, Esther G. Recuero, Alba Quintas Garciandia, Iria G. Parente, Selene M. Pascual o África Vázquez Beltran entre otras. Un acto, una intención, una imagen que evidencia la disposición a un cambio y como las generaciones venideras están más concienciadas que nunca. Y de paso, ya que estamos, para callar bocas, pues luego dirán que sólo son cinco o seis. La Revolución Feminista Geek: un libro de confesiones, lucha, reivindicación, denuncia, rabia, videojuegos, cómics, películas frikis...Un ensayo que inspira y que mira al futuro desde una nave violeta.
Frases o párrafos favoritos:
"No os puedo garantizar, jóvenes escritoras, que las cosas vayan a mejorar. No voy a fingir que no os van a trolear, acosar, amenazar u hostigar. Pero lo que sí puedo prometer es que no estáis solas en la lucha."
Película/Canción: en lugar de adjuntaros el videoclip de alguna canción o el tráiler de alguna de las películas o series analizadas en este libro por Kameron Hurley, he pensado que lo mejor sería acudir a Anita Sarkeeshian. Licenciada en ciencias de la comunicación, Sarkeeshian se hizo famosa por haber denunciado la sexualización, estereotipación y la objetualización de los personajes femeninos en los videojuegos. Creadora del proyecto "Frecuencia Feminista" y conferenciante ha sido desde entonces el blanco del acoso por parte del Gamergate, llegando incluso a recibir amenazas de asesinato. Aquí os adjunto el enlace a una de sus conferencias más famosas. Os recomiendo que le echéis un ojo, merece la pena.
¡Un saludo y a seguir leyendo!
Cortesía de Alianza Editorial