Vivir al margen ofrece una perspectiva única. Pero siempre llega el momento de entrar en escena y ver el mundo desde dentro.Charlie es un chico realmente especial: lee muchísimo, no sale con amigos ni con chicas y reflexiona sobre el mundo desde un punto de vista muy particular. Su ingenuidad, su incapacidad para relacionarse normalmente y su extrema sinceridad le crean más de un problema, especialmente ahora que su único amigo ha muerto. Conocer a Sam y Patrick, los chicos más populares y vitales del colegio, provocará un giro radical en su vida que lo sumergirá de pleno en la adolescencia
Creo que ya dije bastante en la mini reseña en Goodreads, pero como dije que iba a explayarme más, aquí estoy. Quiero advertir que voy a basarme en esos tres puntos que señalé en la mini reseña, así que podré sonar un poco repetitiva.
*se pone detrás de un escudo para que no le duelan los tomates que le tiran*
(Btw, gracias Marti por prestármelo ♥)
Primer punto. Charlie y Stephen Chbosky.
Para ir al punto principal, creo que Charlie es uno de esos personajes creados para simpatizar, y que así mucha gente se sienta identificada, y así recomienden el libro, etcétera. Bueno, yo no simpaticé; es más, me pareció que esto estaba bastante exagerado en ciertos momentos del libro, sobretodo en ciertos contextos (que, en realidad, también me parecieron exagerados -pero en fin).
No todos arrastran una tragedia, Charlie, y aunque así fuera, no los excusaría.
Charlie, para mí, es un personaje muy estereotipado por todo autor, de persona que lee y escucha música, no sale con amigos, que se cree que sus análisis son buenos o que, al menos, comprende más haciéndolos.
Bueno, hace unos cinco o seis años hubiera terminado siendo mi libro favorito; ahora no, para nada. A ver, entiendo que esté enfocado a cierto público y esas cosas, pero realmente me molesta el estereotipo que casi todo autor/editorial tiene sobre los lectores. Y mucho.
Tú ves las cosas. Te las callas. Y las comprendes.
Segundo punto. Mi problema con Charlie.
Nunca me terminó de cerrar como personaje. Al principio me pareció que Charlie era un chico de 10 u 11 años como máximo, a pesar de haber leído otras reseñas; después pensé que tenía algún retraso, de lo cual quiero suponer que hay algo. Todo esto por la manera en que escribe: no el formato, sino la forma.
Sólo espero acordarme de decirles a mis hijos que ellos son tan felices como yo parezco en mis fotografías. Y espero que me crean.
No soporto que sea tan, tan, TAN inocente, más allá de enterarnos de lo que uno se entera al final. Más allá de la dificultad que pueda llegar a tener el personaje, se me hace insoportable y en varias partes del libro tuve que hacer una pausa para no revolear el libro.
En fin.
Tercer punto. Credibilidad.
Voy a mezclar temas personales acá, así que si no quieren leer algo así sigan de largo. No sé.
Yo he sufrido cosas que ha sufrido Charlie, y también sé de gente que ha pasado de las peores cosas que el personaje pasó... y no sentí casi nada como real. Muy cercano a nada. No sentí a Charlie contándome lo que le había pasado, sino a Stephen Chbosky en su casa aburrido un verano contando una historia.
No sentí que el personaje me contara una historia, porque no sentí el impacto que esa historia tuvo en el personaje. Era indiferente a todo, tipo "ay me drogo jaj qué loco", "ay me masturbo qué loco todo", "ay voy a una fiesta jaj qué bueno", todo el tiempo así. Cuando uno no tiene amigos, cuando uno no sale, cuando hay una fiesta, o una reunión, o lo que sea, no escribe en su diario íntimo (o en cartas, en este caso) de la misma manera que lo hace siempre.
Y yo imaginé a este chico en su casa haciendo los deberes y pensando en mi hermana desnuda. Y los imaginé de la mano en partidos de fútbol a los que no prestarían atención. E imaginé a este chico vomitando en los arbustos de una fiesta en la casa de alguien. E imaginé a mi hermana aguantándolo.Y me sentí muy mal por los dos.
Ese creo que fue el error. No estoy criticando los libros contados en cartas, sólo que hay libros y libros para hacerlo. En este no me pareció que le hayan pegado a la idea, porque no me generó lo mismo que si se hubiera contado como novela normal y corriente.
Eso es lo principal del libro. En líneas generales me gustó, por eso tiene la nota que tiene, pero tampoco es mucha cosa. Eso sí, me gustaron muchas frases, y hubo una en particular que me reveló algo de mis anterior relación y mi amistad con mi ex mejor amigo -creo que todos saben cuál es, porque es la más básica-; nunca me había parecido tal cosa, pero cuando la leí con el contexto me pegó fuerte.
Es como si hiciera una fotografía de Sam y la fotografía fuera bonita.Y él pensara que la razón de la que la fotografía fuera bonita es su forma de hacerla. Si la hiciera yo, sabría que la única razón de que sea bonita es Sam.
Creo que era una buena historia que se contó mal; de todas formas, respeto a los que lo leyeron y se enamoraron automáticamente del libro, del autor, de todo. Creo que cada uno acepta lo que le sirve o lo consuela en el momento, y que le gusta aquello que le hace bien; si el libro les hace bien, me alegro muchísimo. En serio que sí.
Charlie, aceptamos el amor que creemos merecer.
(Estrenando plumita nueva, woohoo)