Género: novela de intriga e histórica
Autor: Benjamín Prado
Editorial: Alfaguara
Sinopsis breve: un millonario cuya familia hizo fortuna con el tráfico humano busca a la descendencia de la hija secreta de su bisabuelo, a pesar de la oposición del resto del clan.
Mi puntuación para este libro es...
¿Por qué esa puntuación?: el autor se ha documentado mucho, el problema es que mete con calzador toda esa documentación que, en el fondo, sobra y que está narrada de forma muy fría. A lo que se añaden discursos largos sobre la desigualdad y versos intercalados en los diálogos. Esto logra apenas haya ritmo y que los diálogos resulten poco naturales; nadie habla así y no resultan creíbles ni las conversaciones ni, por extensión, los personajes. Al final, se acelera un poquito, pero para entonces ya era tarde: había perdido el interés y, de todas formas, era predecible, de hecho, se salvan más de los que esperaba y hay muchas cosas que rozan lo forzado y lo poco creíble. Vamos, que la trama está tan diluida y todo contado de una forma tan densa y poco interesante que me ha aburrido mucho.
*Mi ejemplar de la novela Los treinta apellidos me lo mandaron para reseñar. La reseña original (más extensa, pero en esencia la misma) se publicó en Anika entre libros.