Reseña literaria: El beso del ganador

El beso del ganador
Libro 3 de 3Autora: Marie RutkoskiEditorial: NeoEtiqueta: Young adultContenido: amor, amistad, drama, aventura, misterio, erotismoEdición: 2016Páginas: 432Precio en físico: 00,00€Precio en digital: 0,00€

SINOPSIS:La guerra ha comenzado. En el centro del conflicto, Arin se enfrenta al imperio acompañado de nuevos aliados de incierta lealtad. Aunque se ha convencido a sí mismo de que ya no ama a Kestrel, no la ha olvidado, ni tampoco cómo la chica que conocía ha acabado convirtiéndose en la clase de persona que él siempre ha despreciado. Alguien a quien le importa más el imperio que las vidas de personas inocentes… y, desde luego, más que él. Al menos, eso cree. En el norte helado, Kestrel está prisionera en un brutal campo de trabajo. Mientras busca desesperadamente la forma de escapar, anhela que Arin pudiera saber los sacrificios que hizo por él. Anhela hacerle pagar al imperio lo que le ha hecho.GOODREADS
OPINIÓN PERSONAL:Después del increíble y cruel final de El crimen del ganador, no sabéis (o quizás sí) las ganas que tenía de hincarle el diente al último y más esperado libro de esta trilogía: El beso del ganador.
Y es que, algunos elementos que en principio no me llamaba mucho la atención, ya que no estaba muy segura de si leer La maldición del ganador, ha hecho de esta una trilogía fascinante. Hablo con pasión cada vez que me preguntan sobre ella o la saco en alguna conversación, cosa que pasa muy a menudo, porque me es imposible no hablar de Kestrel y de Arin, y de Jabalina, Roshar, Verex y algunos más.
Creo que El beso del ganador es el cierre perfectamente imperfecto para esta trilogía que me ha gustado tanto.
Aunque tengo que decir que desde el maldito principio Marie Rutkoski me ha hecho sufrir una agonía, y es que si tuviera que describir con una palabra esta serie de libros utilizaría esa palabra: sufrimiento. ¡No he sufrido tanto en mi vida! ¡De verdad! Bueno, quizás estoy exagerando, pero si conocéis a Arin y a Kestrel, sabéis de que hablo.
Voy a intentar centrarme en este libro y después os daré mi opinión de la trilogía en general en un breve párrafo.
No quiero hacer spoiler, así que esto es bastante complicado.
Kestrel. Kestrel ya no es la chica que conocíamos en los anteriores libros, es imposible que sea la misma por todo lo que pasa, lo que sufre, lo que vive, me he encontrado una Kestrel con la misma esencia de siempre, valiente, perspicaz, lista, inteligente y estratégica, pero su alma era diferente y durante toda esta última entrega se ha tenido que encontrar a sí misma de nuevo, además de descubrir y enfrentarse a muchas cosas muy difíciles que me han hecho querer arrancarme los pelos de la cabeza uno a uno.
Arin... lo único que puedo decir de Arin es que me he enamorado más de él. He conocido a un Arin más maduro, un Arin que sabe lo que quiere y a quién quiere. Un Arin que no se rinde y que aunque tiene miedo no se esconde, una persona que da sin esperar, o que espera pero tiene paciencia, que se entrega y enamora.
Me encantaría mencionar a muchos personajes, pero solo voy a mentar a Roshar, porque me ha sorprendido, porque me ha encantado, porque ha sido un amigo y un enemigo, porque da miedo y confianza a la vez. Porque lo he adorado, sin más.

Portadas extranjeras.

La pluma de Marie Rutkoski es sencilla y fácil de leer. Aunque la novela está narrada en tercera persona, en todo momento parece que sean los personajes quienes te están contando su historia, porque quizás otra cosa no, pero esta autora sabe envolverte con sus letras y hacerte totalmente partícipe de la aventura, y esta novela es sufrimiento, es sacrificio, es dolor, es llanto. Con momentos duros y crueles. Vellos de punta. Otra cosa que me encantaría destacar es la forma en la que la autora trata a todos por igual, la equidad que hay entre hombres y mujeres sin hacer que nadie sea más que nadie y cómo trata con naturalidad asuntos que, por desgracia, todavía hay quienes no aceptan, como es el tema de la homosexualidad. Es algo que me ha maravillado, porque estaba ahí y no era nada destacable. Era algo más. Como debe ser.
Como he dicho antes, la historia está narrada en tercera persona y el ritmo es constante durante la lectura, quizás a veces un poco frenético o puede que la frenética fuese yo... porque me moría de emoción, de sufrimiento y de ansiedad por saber y avanzar.
En definitiva, El beso del ganador es el broche perfecto para esta trilogía, un desenlace donde vemos crecer y evolucionar a nuestros protagonistas, un final que me ha hecho sufrir, suspirar y cerrar los ojos. Enamorarme también. Un libro que no he podido soltar hasta leer la última palabra.
La trilogía del ganador ha sido una de las mejores que he leído, hacía mucho tiempo que una historia de estas características no me atrapaba así. Ha sido sorprendente, aunque el primer libro fue un poco más lento, los demás han ido in crescendo; los actos de los personajes eran tan reales, duros y en ocasiones crueles que me han dejado sin aliento en más de una ocasión. El amor, que es en realidad lo que mueve a los personajes principales, además de la venganza, es puro, dulce y suave, no es un amor de contacto físico o pasional, pero es que incluso estando ellos en la distancia a mí se me ponían los vellos de punta y se me encogía el estómago por la intensidad de los sentimientos, y eso, queridos amigos, que no es algo fácil de conseguir, esta autora lo ha logrado. Me encantan esos amores tan inocentes y fuertes que te roban el alma y te hacen coger aire con fuerza, y Arin y Kestrel me han hecho coger mucho aire. Además, la pluma de la autora me parece magnífica y la historia y la trama apasionante. Mucho. Me encanta la ubicación, la época y los sucesos.
Una trilogía de diez que, sin duda, recomiendo muchísimo.Lo mejor: la evolución de los personajes y su historia.
Lo peor: en mi opinión, nada.
VALORACIÓN: