Reseña | Nunca serás agua, Patricia A. Miller

La familia, el trabajo y el béisbol son los tres pilares de la vida de Megan Gallagher, la única bombera de la 52 de Chicago. Es valiente y perseverante; pero una decisión errónea puede convertir una vida de esfuerzo y pasión en pesadilla. Una grave lesión llevará a Megan lejos de su felicidad, pero cerca de él, Nicholas Slater.

Nick es fisioterapeuta en el Delorce Medical Center, en Springfield, y le acaban de asignar a una de las peores pacientes de los últimos años. Es temeraria, cabezota y cree que la rehabilitación va a ser pan comido, pero se equivoca, y la inagotable paciencia de Nick llegará al límite cada vez que deba trabajar con ella.

Algo muy intenso empezará a arder con el paso de los meses. El sarcasmo se convertirá en diversión, el trabajo en compañía y el dolor en consuelo. Pero hay demonios que siempre vuelven y cicatrices que nunca acaban de cerrarse.

Nunca serás agua es una novela de emociones que arden bajo la piel,
como las brasas de un poderoso incendio

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Leer a Patricia A. Miller siempre resulta refrescante y estimulante, además de asegurarte una lectura inolvidable de las que te sacan los colores y el corazón se acelera con cada página que pasas. Pues bien, esto mismo y muchas más cosas es lo que he experimentado leyendo su última novela publicada por Ediciones Versátil, Nunca serás agua, horas de intensa lectura donde ha sido imposible no dejarme llevar por la emoción de la historia y por las duras vivencias que encontraba, un libro lleno de dolor y sufrimiento, pero también de fortaleza y de grandes lecciones que me han hecho ver la vida con otros ojos, con un prisma de colores mucho más brillante repleto de posibilidades.

Megan Gallagher , MC para los amigos, es bombera de profesión y de corazón en la 52 de Chicago. Para ella el fuego es parte de su mundo, la hechiza y la envuelve, siendo ella el agua que lo controla y la erradica. Sin embargo, todos sus sueños y metas van a verse truncadas tras sufrir un desafortunado accidente que va a postrarla en una silla de ruedas por una larga temporada, meses complicados que van a poner a prueba su paciencia y estabilidad, despertando en lo más profundo de su alma un miedo irracional a no poder regresar en plena forma junto a sus compañeros y amigos. Con lo cual, evitará auto compadecerse y se centrará al cien por cien en reducir el tiempo de convalecencia esforzándose al máximo, yendo si fuera necesario más allá de sus límites. No obstante, su alocado plan para volver a la normalidad va a chocar con un gran obstáculo, pues su fisioterapeuta tiene unos objetivos muy distintos a lo que ella esperaba, lo que convertirá su rehabilitación en un campo de batalla colmado de sufrimiento y de duras momentos que sobrellevar.

Nicholas Slater como fisioterapeuta en el Delorce Medical Center va a toparse con el mayor reto de su vida. En todos los años que lleva ejerciendo esta profesión nunca se había encontrado una paciente tan obstinada y cabezota como Megan Gallagher, un verdadero dolor de cabeza que está convencida que su recuperación va a ser pan comido. Por lo tanto, su plan de actuación con ella no va a ser cotidiano, tendrá que salirse de lo habitual pues necesita hacerla bajar de las nubes y que acepte el gran camino que aún le queda por recorrer, algo difícil de conseguir ante la tozudez de la joven. Sin embargo, el conoce toda clase de trucos para conseguir que recapacite por lo que echando mano de su infinita paciencia le abrirá los ojos ante la realidad que su rehabilitación plantea, un largo recorrido que va a traerle más de una sorpresa.

Así pues, Nick y MC comenzarán una relación terapeuta-paciente llena de baches y encontronazos, lo que los llevará a mostrar su fuerte carácter obligándolos a ceder en muchos momentos ante la explosiva e incendiaria personalidad que gastan, todo un desafío que los guiará a compartir largas horas de terapia donde las emociones estarán a flor de piel abriendo las puertas a desconocidas emociones para las que ninguno estará preparado. Asimismo, mientras el dolor por lo ocurrido y el miedo a no alcanzar una completa recuperación invade el pensamiento de Megan, Nick siente que está cada vez más enamorado de su guapa paciente, una locura pues el monstruo que esconde su alma siempre va a impedirle ser feliz y hacer dichosa a otra persona, por lo que negará sus sentimientos y se distanciará de ella a costa de todo lo bueno que puede alcanzar junto a su sexy bombera. Con lo cual, su historia se rodeará de pequeñas discusiones y de divertidos enfrentamientos que afilarán sus ingenios y sus lenguas lo que traerá de cabeza las emociones de este par de enamorados que tanto terror tienen al amor. Igualmente, cuando ya les es imposible seguir negando lo que sienten decidirán jugárselo a un todo o nada, dejándose llevar por lo que están experimentando, empujándolos a un nivel de confianza mucho mayor que tal vez a Nick le resulte complicado enfrentar. De esta forma, sin darse cuenta, los secretos de nuestro héroe se convertirán en una espinosa barrera para su historia de amor, alejando a su amada y colocándolo en la disyuntiva de, o bien sincerarse con ella y afrontar el gran problema que lo acosa o dar un paso atrás y volver a la triste y vacía existencia que tenía antes de conocer a la insufrible bombera de la 52, todo un dilema que también pondrá a prueba el amor de Megan y la fe en lo que siente por Nick, el verdadero amor de su vida, el único hombre que ha sabido quererla tal y como es, con sus defectos y sus virtudes.

Patricia A. Miller nos regala una historia que es puro sentimiento, todos los personajes que encuentras, no solo Nick y Megan, te arrastran a vivir con intensidad y pasión la novela, aportando cada uno emociones a la obra que van directas al corazón de los lectores. Con lo cual, nuestra pareja protagonista ha estado acompañada de un gran elenco que ha ayudado a transmitir el gran mensaje que esconde este libro, donde la valentía, la lucha y la fortaleza se convertirán en los principales ingredientes de esta fascinante novela. Asimismo, MC y Nick no serán héroes planos carentes de personalidad, sus fuertes caracteres lo convertirán en principales llenos de matices e inquietudes que descubrir, los cuales nos cautivarán desde el primer minuto, además sus tira y afloja serán claves para conocerlos mejor y profundizar en ellos hasta entender la verdad sobre sus vidas y sus corazones. Igualmente, la obra ha contado con todo un misterio, el pasado de nuestro listillo fisioterapeuta, rodeado de culpa y pesar, dos elementos que se interpondrán en su felicidad, la cual no estará completa hasta solventarlos y dejar que su amada acceda a ellos, por lo que el gran dilema será ese pasado que no olvida y que ha marcado cada paso que ha dado. A su vez, Megan con su temeridad y su cabezonería se convertirá en la piedra de Nick, una mujer que ha tenido que pelear para ser quien es, en medio de un mundo de hombres que no le han puesto las cosas fáciles teniendo que alzarse y luchar por ser alguien en una profesión tan machista y prejuiciosa. Así pues, todo esto me conquistó y me hizo darme cuenta de la gran mujer y profesional que es nuestra heroína, una luchadora que defiende sus derechos y pasiones, convirtiéndose en todo un ejemplo a seguir. De esta manera, la historia ha contado con amor, con grandes protagonistas y con deslumbrantes emociones todo ello dirigido a envolver el alma del lector llevándolo a vivir una aventura explosiva, donde el fuego de los deseos y anhelos incendiarán sus corazones. Por último, no puedo dejar de alabar la pluma de su autora, con una exquisitez extrema te engancha y te empuja a devorar las hojas de una obra como pocas que se volverá indispensable entre tus lecturas.

Nunca serás agua de Patricia A. Miller conquistará el alma de los lectores, una historia exuberante, decidida y luchadora donde conoceremos el romance de Nick y Megan, dos jóvenes llenos de dolor y pesar que se encontrarán cuando más se necesitaban hallando el camino correcto hacia la felicidad y el perdón tanto tiempo buscado, un amor valiente y fuerte que traerá la dicha a sus corazones.