Hay veces que un libro es capaz de sumergirte tan profundamente en él que cuando lo terminas sientes como si despertaras de un profundo sueño.
Palmeras en la nieve, de Luz Gabás, es de esos libros. Ambientado a caballo entre mediados del siglo XX y la actualidad, nos narra la historia de algunos de los colonos españoles que marcharon hacia la isla de Fernando Poo (actualmente conocida como Bioko) en la lejana y exótica Guinea Ecuatorial en busca de fortuna con la exportación del cacao.
Muy lejos quedan para gente de mi edad los ecos de la España colonial y, pese a ello, Gabás es capaz de mostrarnos la frondosidad de la selva guineana con una vivacidad y claridad que hace que casi sientas el opresivo calor en tu pecho conforme vas leyendo. Y con cada gota de sudor revives la dureza de la vida lejos de la tierra natal, la dificultad de la convivencia entre culturas, la crueldad del racismo, de la intolerancia, del miedo a lo diferente.
Entre tanto, nos teje una preciosa historia de amor, desamor, violencia, respeto y recuerdo entre los convulsos años en los que Guinea Ecuatorial consiguió la independencia. Una historia que llega despacio, como sin querer, presentándose entre velados recuerdos e historias inconexas, pero que conforme va cogiendo forma se te agarra de tal forma que sus personajes los haces tuyos, terminan siendo conocidos, amigos.
Una increíble forma de conocer mucho más y desde muchas más miradas lo que allí sucedió, cómo se comportó España con ellos, cómo se comportaron ellos con España.
Y con ello intentar alcanzar un punto más de comprensión en este tipo de conflictos y, sobretodo, no olvidar: ni a los que fueron y volvieron, ni a los que se quedaron.
Recomendadísimo.
#escuchando: Passenger – Let her go.