Autor:Amy Lab
Editorial:Alfaguara Saga:1/1
Paginas:544
Precio:15.50€
Oliver, un misterioso y atractivo chico, aparece en la vida de Alex. Al principio parece duro y distante, pero poco a poco Alex irá conociendo su lado más tierno... aunque también su lado más salvaje, mientras intenta desvelar los secretos que esconde tras su esquiva mirada. Había leído el anterior libro de Amy Lab (pseudónimo de las autoras María Cereijo y Ana Alejandro) Nunca digas nuncas, el cual había decidido leer después de leer todas las buenas críticas que había leído sobre él, sin embargo al final me decepcionó y no me pareció gran cosa. Por eso, cuando publicaron Pero a tu lado no imaginé que me fuese a gustar como lo ha hecho.
Misterio, intriga, amor y unas cuantas risas se mezclan en esta increíble historia. Alexia nos cuenta la historia desde su punto de vista, aunque de vez en cuando una voz en tercera persona relata unos acontecimientos que comprenderemos al final del libro.
Estaba harta de ser tan normal, de que mi vida transcurriera por los cauces preestablecidos, pero ¿qué iba a decirle?
Alexia es una adolescente simpática y alegre, no es un gran personaje pero tampoco la podemos meter dentro de estereotipos, su sinceridad a la hora de narrar me ha resultado muy cómoda, además su espontaneidad es un punto muy positivo. Personalmente me ha parecido un personaje muy real; sus pensamientos, sus problemas son muy acordes con su edad. Por otra parte tenemos a Oliver, un personaje completamente fascinante. Me he encontrado muy pocas veces con un personaje como él; se aleja totalmente de tópicos y posee una personalidad arrolladora que lo hace destacar de forma bruta. Al principio nos costará conocerlo, pero poco a poco nos iremos acostumbrando a sus idas y venidas, sus cambios de humor y el halo de misterio que lo rodea. Entre los personajes secundarios me gustaría destacar a Gabriela, la mejor amiga de Alexia. Aporta alegría a la lectura, es una chica con luz propia que servirá en muchas ocasiones como apoyo de Alexia, y nos sacará unas cuantas risas con sus diálogos y ocurrencias.
Al principio nos encontramos con una historia bastante común: chica adolescente con típicos líos amorosos y un grupo de amigos en el que surgen risas, buenos momentos, peleas… Poco a poco la historia va evolucionando y entremezcla estas situaciones tan habituales con otras que no lo son tanto, creando un coctel perfecto.
Me esforcé en recordar algún pianista conocido, pero mi cultura musical era tan pobre que daba vergüenza. -¿Algo de los Beatles? Imagine es con piano, ¿no?- queda bien mencionar a los Beatles, porque nadie se atreve a confesar que no les gusta y suena muy cool. -Imagine es de John Lennon, no de los Beatles- dijo con condescendencia mientras abría la tapa del piano y arrancaba las notas de la canción.
Las más de quinientas páginas del libro se pasan en un suspiro. Hacía mucho tiempo que una historia no me enganchaba de tal forma. El ritmo es muy adecuado, no es ni lento ni rápido, hay descripciones adecuadas y escenas que no son imprescidibles pero que ayudan a que no estemos siempre en tensión y tengamos un descanso mientras Alexia habla con sus amigos y se divierte con ellos, además nos ayudará a conocer a los demás personajes, todos muy variados.
La resolución del misterio me ha parecido un tanto precipitado y no ha sido como esperaba. La autoras consiguen que los últimos capítulos sean una agonía y una tensión constante, saben hacernos sufrir, aunquer el final es bastante cerrado y he quedado en general satisfecha con él.
Lo que más me ha gustado: el ritmo y los personajes. Lo que menos me ha gustado: me gustaría haber sabido algo más de Oliver, porque verdaderamente es un personaje que no tiene desperdicio.
Inesperado y adictivo, con unos personajes que harán las delicias de cualquier lector.