Como casi todas las obras de novela negra todo comienza con un asesinato, en este caso es un chico de 16 años el que ha desaparecido. Al grupo de investigación comandado por Torkel se les unirá, a través de engaños, el eminente psiquiatra criminal Sebastian Bergman. A medida que las investigaciones avanzan, vamos descubriendo aspectos oscuros de muchas de las personas que se relacionaron con el muchacho, su madre, amigos, profesores, todos tienen algo que esconder lo que da como resultado un desarrollo de la trama dinámico, ágil en la que siempre están sucediendo cosas, volteando el resultado final cuando ya pensábamos que estaba casi resuelto, dando giros y más giros, lo que obliga al lector a estar pendiente para no perderse ningún detalle.
Pero también iremos conociendo al equipo que trabaja para descubrir que le sucedió a la víctima, sus miedos, sus vidas íntimas, lo que nos ayudará a introducirnos en la historia y disfrutarla aún más. Pero por supuesto no nos podemos olvidar de aquél que da nombre a la serie, Sebastian. Lo más seguro es que lo llegues a odiar un poco, no es para nada alguien con el que nos sentiríamos a gusto, tiene mil imperfecciones aunque su pasado tampoco ha sido fácil, con un espíritu roto, con lo que a medida que avanzamos nuestro odio se irá disipando un poco para sentir pena por él.
Esta novela no es perfecta ya que existen ciertas maneras en las que se ha desarrollado uno de los casos que chirría, en la que no terminan de encajar las piezas; me molestó sobremanera esta equivocación ya que en líneas generales la obra es muy buena y me parece que es un detalle muy tonto para fracasar en ello.El hecho de que ambos escritores sean guionistas se nota en esta novela, es casi como si estuviéramos leyendo alguno de los casos de esas series ya míticas en televisión como CSI, en el que nos hacen partícipes de cada una de las pruebas y líneas de investigación que se están llevando a cabo y van cambiando de culpable con cada nuevo secreto descubierto, por lo que, los que disfruten con este tipo de series están de enhorabuena.