Reseña: Sígueme la corriente - Megan Maxwell

Sinopsis:

Tony Ferrasa es un guapo, adinerado y exitoso compositor de música puertorriqueño. No hay mujer que se le resista y que olvide con facilidad su mirada verde y leonina. Ruth es una joven que con apenas veinte años tuvo que hacerse cargo de su hermana recién nacida y de un hermano delincuente. Cuando parece que por fin consigue encauzar su vida, se queda embarazada y su pareja acaba abandonándola. Para sacar adelante a su familia acepta cualquier trabajo digno que se le presente, por lo que Tony y Ruth acaban conociéndose en una fiesta en la que ella sirve como camarera. A partir de entonces, como el destino es tan caprichoso, se encuentran en diversas ocasiones, y a pesar del interés que él le demuestra, ella se mantiene fría e indiferente. Poco a poco ambos se van enganchando a una no-relación que acaba por desvelarles que lo que sienten el uno por el otro es mucho más intenso de lo que están dispuestos a admitir. Intentan alejarse, pero cuanto más empeño ponen en ello, menos lo consiguen y más fuerte se hace la atracción. 

Editorial: EsenciaLibro autoconclusivoNº de páginas: 476
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Opinión personal:
Este libro es un spin off de la bilogía Adivina quién soy de Megan Maxwell y lo que me ha gustado, y mucho, es conocer la evolución de los personajes que ya conocimos en la bilogía: Yanira, Dylan, Tifany, Omar, Anselmo, Preciosa, las amigas de Yanira... La familia Ferrasa al completo hará acto de presencia en el libro.
Ruth ha tenido una vida muy difícil, cuando era joven, sus padres murieron y ella tuvo que encargarse de su hermana pequeña Jenny, se enamoró de la persona menos indicada y cuando se alejó de su lado se enteró de que estaba embarazada, y de gemelos ni más ni menos. Así que desde bien joven, tiene a tres niños a su cargo y el dinero siempre hace falta. Menos mal que tiene a David y Manuel, sus dos mejores amigos, que la ayudarán en todo lo que puedan. Tony Ferrasa, en cambio, es un conquistador nato, un chico guapo con sonrisa perfecta, cochazo impresionante y los ojos como los amaneceres de Acapulco, como bien le describe Jenny.. Una noche, trabajando de camarera en un evento de alto standing, conocerá a Tony Ferrasa, el famoso compositor que vuelve locas a todas las mujeres. En un primer momento Ruth no estará interesada en mantener una relación con él, pero a lo largo de las páginas, su opinión cambiará y su vida, la de Tony y la de sus hijos, cambiará radicalmente.
En los libros de Megan que había leído hasta ahora, la historia siempre estaba contada desde el punto de vista de la protagonista o como muchos de dos personajes, pero en este libro, el estilo narrativo cambia y nos encontramos con una historia contada a varias voces, donde destacarán Ruth y Tony Ferrasa.
Como suele ocurrir en las novelas de Megan, el título suele ser una frase o momento importante de la historia. En este caso, "Sígueme la corriente" fue la primera frase que Ruth le dijo a Tony cuando se conocen y aparecerá en varios momentos determinados de la trama. Aunque no es una novela con unas escenas de sexo tan explícito como en varios de sus otros libros, sí que nos encontraremos con escenas de alto voltaje entre nuestros dos protagonistas.
Al principio no conseguía conectar con los personajes, Ruth me parecía un poco pedante, todo pasaba muy deprisa, aparecían varios saltos en el tiempo y todo me parecía muy rápido y precipitado, lo único que me gustaba era cuando se hacía mención o salían en escena alguno de los personajes que ya conocimos en Adivina quién soy, pero hacia la mitad del libro, más o menos, fue cuando de verdad me empezó a gustar la historia y se me hizo muy corto. A pesar de sus casi 500 páginas, cuenta con capítulos cortos (nombrados con títulos de canciones de habla hispana) y la lectura es bastante ágil.
Veremos a la familia Ferrasa más unida que nunca y cuando se junten, que será en varias ocasiones, nos ofrecerán momentos muy divertidos y familiares, porque sí, las novelas de Megan destacan por el tono divertido y desenfadado que usa, acercándonos así a sus protagonistas para sentirnos identificados con ellos. Tony fue un personaje que me gustó mucho en la bilogía original y me alegré cuando la autora anunció que iba a sacar un libro sobre él, porque se lo merecía.


Una novela que sigue el estilo de Megan Maxwell, con personajes cercanos, divertida y, sobretodo, muy pasional.

*Muchas gracias a la Editorial por el ejemplar*