Reseña: Spider-Gwen 2

11 Nov 2015
Escritor: Jason Latour
Dibujo: Robbi Rodriguez
Colores: Rico Renzi
Editor Nick Lowe

La serie que se convirtió en favorita de mucho de nosotros en tan poco tiempo está dándose un par de tumbos por regresar al dinamismo que mostró en su volumen debutante.
Está claro que el argumento planteado por Jason Latour en sendos primeros números (Great Power I y II) no fue el adecuado. Teniendo pobreza argumental, carencia emocional y un problema con la integración de personajes, como las versiones del Capitán América y Falcón, este comic no logra establecerse e ningún momento.
Es el único trabajo donde Robbi Rodriguez se muestra difuso. Hace del enfrentamiento contra Lizard una secuencia entretenida pero difícil de leer. Si a eso le sumamos la extensa platica entre el tío Ben y el Cap Stacy, tenemos un exceso de elementos.
No hay duda de que los colores de Renzi sieguen siendo el motor en la ilustración: la fórmula del cambio de colores en cualquier flashback es precisa.  Me gusta bastante la idea de poner énfasis en el movimiento del escudo del Cap.
Sigue estando la agilidad, el buen humor y la frescura de Gwen, pero sin ninguna solidez en la historia base es difícil que todo lo demás saque a flote el barco. En lo particular este Lizard me pareció uno de los villanos peor utilizados, tanto por Latour como Rodriguez; no sabemos ni de dónde viene ni a donde va. En este mismo aspecto se mueve el misterio por la muerte de Peter Parker, un tema que se ha venido estirando y que pone en la mesa dudas que probablemente el escritor no logrará resolver coherentemente en un futuro.
No creo que sea un decaimiento en el grupo de creativo atrás de Spider-Gwen, yo más bien apunto a una historia mediocre. En ningún momento el tándem entre Latour y Rodriguez se sintió cómodo abordando esta historia.
Cerrando este par de números inestables, se viene un choque con Spider-Woman que seguramente nos hará olvidar este bache.
Spider-Gwen 2 ofrece muy poco en el plano argumental. Su historia es endeble y mal tejida por Jason Latour. Los puntos clave de la serie, como el humor de Gwen en situaciones complicadas, no fueron suficientes en esta ocasión.