Reseña: Todo lo que no ves de Nora Roberts

Los Bigelow aparentan ser la familia perfecta: el padre es un respetado cirujano; la madre, una devota ama de casa; y sus hijos, Zane y Britt, los adolescentes más afortunados de Lakeview Terrace, una pequeña comunidad en la cordillera azul de Carolina del Norte. Pero las apariencias engañan y la casa de ensueño de los Bigelow es, en realidad, un infierno del que parece imposible huir.

Años después, Zane conoce a Darby, una mujer hermosa y valiente que se hospeda en uno de los bungalós que alquila su tía Eliza y que, al igual que él, es una superviviente nata.La atracción que sienten el uno por el otro es innegable, pero, cuando el pasado del que habían creído escapar les alcanza, tendrán que sacar fuerzas de su interior si quieren construir un futuro juntos.

Mi Opinión

Nora Roberts es una autora bastante prolífica que tiene ya varios libros en su haber. Diría que varios es quedarse corto, es complicado llevar la cuenta de todos sus libros publicados. He leído a la autora en varias ocasiones aunque en su mayoría ha sido en el género de romántica contemporánea y no tanto en thriller. Es una autora que suele sorprender con sus novelas y que normalmente me gusta, pocas novelas suyas me han defraudado.

En esta novela nos encontramos con una familia ejemplar: Los Bigelow. Un matrimonio compuesto por Eliza una mujer ama de casa y Graham un médico reputado y sus dos hijos Zane y Brit. Tienen todo lo que uno pueda desear: una casa envidiable cerca de un lago, dinero, estatus social pero las apariencias engañan. Como se suele decir no es oro todo lo que reluce. Los jóvenes de la familia lo descubren muy pronto. Desde el primer momento vemos que detrás de la puerta de la casa ocurren autenticas barbaridades. Graham tiene complejo de Dios, cree que todo lo puede y que nada de lo que haga tendrá consecuencias. Eliza es retorcida, es un personaje malvado y da bastante grima. Zane y su hermana pronto aprenderán que tienen que sobrevivir.

Años después Zane es un abogado reputado que vuelve a cada para instalarse, y conocerá a Darby, una mujer que se dedica al paisajismo y que ha escogido Carolina del Norte para echar raices y asentarse. Dos personas que son supervivientes, que están rotos a cierto nivel saben reconocerse. Por ello Zane y Darby se hacen algo más que amigos. Sin embargo, el pasado siempre vuelve, por lo que ambos toman las riendas para acabar con él y que deje de atormentarles.

En general, la novela se lee en un suspiro. Hacía mucho que no leía una novela de la autora con suspense y ha sido muy gratificante la lectura. No puedo compararla con otras novelas suyas pero os puedo decir que si os gusta el buen suspense combinando con la historia de amor de dos personajes fuertes esta es vuestra novela. La camaradería y conexión que existe entre Darby y Zane se palpa desde el primer momento, hay cierta tensión sexual no resuelta. Solo tengo buenas palabras para esta historia ya que en el momento lecturil que estoy ahora mismo ha sido como un soplo de aire fresco.

Creo que la novela tiene la combinación justa entre romance, suspense e historia familiar. Aderezado con unas descripciones de Carolina del Norte que tienen paisajes imponentes. Puede que mucha gente considere que es una novela previsible pero bajo mi punto de vista eso no le quita mérito a la trama. La autora ha perfilado muy bien los personajes, tanto Zane como Darby son fuertes, sensibles, poseen una gran valentía y entereza. Eliza y Graham son personajes muy siniestros, realmente inquietantes por que son personajes llenos de maldad.

Os animo a que le deis una oportunidad a la autora con esta novela si aún no la habéis leído. Y si ya la conocéis estoy segura de que no os defraudará.

ó