(#reseña) Un féretro en el tocador de señoras, de Regina Roman​

Autora: Regina Román
Título: Un féretro en el tocador de señoras
Editorial: Círculo Rojo
Páginas: 253 páginas.
ISBN: 9788492849673
Puntuación lectura: 2/5

¿Qué hacer cuando te peleas con tu rica familia y te vas de casa?
Sencillo, irte a vivir con tu novio.
¿Qué hacer cuando la vida junto a tu novio pijo se hace insoportable?
Sencillo, pillarte tu propio apartamento.
¿Qué hacer cuando un fantasma revoltoso se instala en tu piso?
La cosa se complica... bastante.

Un féretro en el tocador de señoras está escrito en primera persona,  donde Regina Román nos narra el día a día de Olivia, sus problemas, sus soluciones, sus discusiones y sus intenciones. 

Desde mi punto de vista personal, a mitad del libro es cuando la historia se acelera hacia el final.  Apareciendose un fantasma a nuestra protagonista, convirtiéndose en buenas amigas. (que fuerte) además de nuestra protagonista principal hay una buena cantidad de secundarios: Marina, Dora, Fidel, Gonzalo, Amparo, los padres y su hermano, etc. 

Debo reconocer que aunque la historia es rápida de leer, no he tardado más de una tarde, no me ha terminado de enganchar en ningún momento. Eso sí, en un principio todo sorprende porque no se sabe por dónde va a tirar la historia. Tiene su historia de desamor, su historia de amor y su historia de amistad. Hay personajes secundarios que uno se pregunta por qué los nombra a todas horas si después no hacen nada en el libro salvo tocarse la nariz (vamos nada de nada y si  no estuvieran no influye en la narración ni desarrollo de la historia) ademas de situaciones que ocurren pero no tienen más repercusión.

Estoy de acuerdo con lo que me comentó una amiga cuando se lo leyó, nuestra protagonista que es pijo hasta decir basta. El libro está cargadito de clichés, de egoísmo y de pijerío. Vale, va evolucionando a lo largo de las páginas del libro hasta llegar al final, pero no me ha conseguido de atrapar, me ha puesto nerviosa en ocasión y en otras me ha parecido tan egoísta y pagada de sí misma que me han dado ganas de ser agresiva con ella para que viera que no todo el mundo vive alrededor de su ombligo y encima se queja del mundo pijo donde vive, siendo ella la reina del "ósea soy maravillosa, perfecta, visto requetebien, estoy delgadisima y ósea, monisima de la muerte". En definitiva, una protagonista muy, pero que muy, repelente.

Es un libro sencillo, de fácil lectura, que se lee muy rápido porque tampoco es que sea excesivamente gordo. El estilo de la autora busca divertir, con situaciones normales cargadas de algo más, y creo que Regina Román tiene libros mejores que este. Se queda en un libro con una historia diferente por el tema de Gilda y de toda la historia que la rodea, que busca adentrar en un mundo donde la apariencia y el qué dirán es todo, donde hay mujeres manipuladoras, padres que se enfadan y se cabrean si no se hace lo que se quiere como en todas partes e hijas que se rebelan aunque sea con 25 años, donde el amor puede aparecer en el sitio más inesperado.

Un libro para una lectura de verano, sin más pretensiones que el de entretener y contar una historia.

Malagueña de nacimiento, mediadora familiar por convicción, actriz por pasión y escritora por vocación. Considera que uno de sus mejores logros en la vida ha sido encontrar respuesta a la pregunta "¿cómo ser feliz y no morir en el intento?". Ama los finales felices, escribe con la intención primera de entretener, y no aspira a una butaca en la Real Academia, le basta un taburete en la Academia del Bienestar. Porque si hay un monje que vendió su Ferrari, Regina es la monja que regaló su Porsche Cayenne.