"Hurgar en la vida de los demás te hace sentir un intruso, y este mensaje me hizo sentir especialmente incómoda, era tan personal... pero también despertó en mí una enorme curiosidad: el destino había querido que aquél fuera el último mensaje de alguien..."
En un mundo sin cartas, las historias de amor necesitaban encontrar su lugar.
Ésta se esconde en 704 mensajes.
En cuanto conocí la existencia de este libro sabía que tenía que hacerme con él. La forma en la que está escrito me recordó mucho a Contra el viento del norte, de Daniel Glattauer (uno de mis libros favoritos, por no decir que es mi libro favorito): persona manda mensaje por error a otra persona y empieza una historia que se prevé preciosa.
Esta reseña va a ser muy, muy corta, pero no puedo explicar ni contaros mucho más de el libro sin chafaros la historia. Conoceremos a Alex, una agente de policía que se encarga de un caso en el que una pareja muere por un accidente de tráfico. En el lugar de los hechos encontrará un movil que esconde 704 mensajes de texto entre el dueño del teléfono y un destinatario desconocido. Y no podrá evitar sentir curiosidad sobre el contenido de esos SMS.
Es un libro con un ritmo brutal y que se lee en un suspiro, yo tardé aproximadamente una hora y lo cerré con una sonrisa en la cara. Volverán las naranjas esconde una historia muy bonita, que si bien no es un libro que vaya a pasar a la historia, es un libro que he disfrutado muchísimo y me ha resultado muy entretenida y amena.
Como he dicho, no puedo contaros mucho más de la historia, la verdad; es un libro muy corto y considero que es una historia que debéis descubrir vosotros mismos y que creo que os hará sonreír en más de una ocasión, como a mí.
En definitiva, si os apetece leer una historia entretenida, amena y bonita, leed Volverán las naranjas; no tardaréis mucho más de una hora en acabarla y, como he dicho, lo haréis con una gran sonrisa en la cara.
Un beso a tu beso.