Cuando SARA FOSTER se escapa de casa con dieciséis años, deja atrás a la niña que un día fue, capaz de desarrollar vínculos de confianza e intimidad. Años después, ya establecida en Los Ángeles, se ha convertido en una codiciada barman, conocida tanto por sus brillantes cócteles como por el misterio que le rodea.
Al otro lado de la ciudad, EMILIE DUBOIS está estancada, anhelando la belleza y la comunidad que sus abuelos criollos cultivaron, pero incapaz de comprometerse con nada. En un arrebato, acepta un trabajo componiendo arreglos florales en el glamuroso restaurante Yerba Buena y se embarca en una aventura amorosa.
La mañana en que Emilie y Sara se conocen en el Yerba Buena, su conexión es inmediata. Pero el dolor que las dos mujeres albergan y las decisiones que han tomado en el pasado las separan una y otra vez. Cuando la antigua vida de Sara llama a su puerta, poniendo en duda todas sus creencias, lo hace en el preciso momento en que Emilie consigue comprender su propósito en la vida. Y entonces deberán decidir si es posible vivir el presente mientras dejan el pasado atrás.
Hoy vengo a hablaros de mi última lectura de febrero. ¿Tanto tiempo después? Pues sí, pero es que nunca veo el momento de ponerme al día con las reseñas 😅 En otro orden de cosas, descubrí esta novela poco antes de que se publicase y en cuanto leí la sinopsis y vi que se trataba de una historia donde había representación del colectivo LGBT+ y de una autora de renombre, no me lo pensé demasiado y me lancé a leerla gracias a la editorial. Además, es una novela cortita, de apenas doscientas cincuenta páginas, perfecta para leer en esta época del año, por ejemplo 😇
La novela se nos presenta narrada en tercera persona desde el punto de vista de Sara y Emilie, alternándose los capítulos narrados por una y otra protagonista. Sara perdió a su madre hace un par de años, por lo que vive con su padre y su hermano, y será otro suceso trágico el que la separará de ambos. Emilie, por su parte, vive con sus padres y su hermana mayor, que sufre adicciones. Ambas saben perfectamente lo que supone vivir con miedo, incertidumbre y dolor, lo que supone no tener un futuro marcado... Al menos hasta que se conocen casi por casualidad en el Yerba Buena, un conocido y glamuroso restaurante. ¿Podrán dejar el pasado atrás y vivir el presente?Los personajes secundarios no son muy numerosos. Si acaso, destacaría a los familiares directos de Sara y Emilie y a Grant, un chico al que Sara conoce a raíz de ese trágico suceso que la separa de su padre y hermano y que, sin duda alguna, se convierte en un gran apoyo para ella. En general, me encontré con unos personajes bien trabajados y pulidos, aunque sí es cierto que me costó un poco conectar con las protagonistas, empatizar con ellas o, mejor dicho, con sus emociones, pero tanto Sara como Emilie muestran una gran evolución a lo largo de la novela y demuestran ser unas chicas valientes y dispuestas a todo por encontrar la estabilidad en sus vidas.
La trama, en apariencia sencilla, trata un sinfín de temas, por lo que se nos invita a reflexionar en muchas ocasiones. Nina LaCour nos habla de la familia, del amor en todas sus formas, de la amistad, de las raíces y el sentimiento de pertenencia, de las adicciones y cómo estas influyen en las relaciones... con el colectivo LGBT+ muy, muy presente.
«La omisión había sido una mentira que se había contado a sí misma. Una mentira que nunca había logrado que se sintiera mejor».
Aunque pueda parecer lo contrario por lo que se puede leer en la sinopsis, el romance no ocupa el eje central de la novela, aunque está claro que tiene importancia. ¿Me gustó? Sí porque me pareció muy realista, con sus luces y sombras, y un tanto pausado y atípico, pero no ha sido el tipo de romance que me suele gustar encontrar.
En general, diría que estamos ante una novela coral centrada más en los personajes y su desarrollo que en la propia trama en sí. Es cierto que esperaba 'más acción' pero, aun así, he visto una trama bien trabajada y desarrollada, con sus buenas dosis de drama y romance, y me gustaría avisaros del contenido sensible que podéis encontrar si os animáis a leerla, por si acaso. En definitiva, 'Yerba Buena' es una novela opuesta a las llamadas 'novelas feel good'.
La pluma de la autora no la conocía y me ha gustado a medias, es decir, su forma de escribir tan intimista, sencilla y cargada de emociones gusta, pero me costó hacerme a su estilo, sobre todo al principio. Solo por la forma en que trata los sentimientos y todos los temas que toca, con delicadeza y realismo, volvería a leer a Nina.Por otra parte, aviso para los amantes de los capítulos cortos: 'Yerba Buena' no tiene capítulos precisamente cortos 😜 Es más, algunos superan las veinte páginas, así que si, como a mí, os gusta dejar la lectura al terminar un capítulo, con esta novela estaría complicado de no ser por las separaciones que hay dentro de los propios capítulos. Aun así, el ritmo de lectura llega a ser lo suficientemente ágil y ameno, y hay bastante diálogo.
Y ya, para terminar, confieso que el final me decepcionó un poco por el simple hecho de que esperaba algo diferente, algo más. Por ejemplo, esperaba encontrar un epílogo, o quizá un capítulo más, que me ayudase a saber o entender el rumbo que toman los personajes a partir de la última escena, así que en ese aspecto, el final me pareció demasiado abierto y un tanto agridulce. Por lo demás, decir que he disfrutado bastante la novela y me ha dejado un buen sabor de boca, pero reconozco que esperaba más en general. Estoy segura de que los amantes o asiduos del género disfrutaréis mucho más de 'Yerba Buena' y de lo que tienen que contar sus personajes.
3/5~ Gracias a Umbriel por el envío del ejemplar ~Y vosotros,¿habéis leído esta novela? ¿Os gustaría leerla? Contadme :)¡Nos leemos en la próxima entrada!