Título original: Detachment. Director: T. Kaye. Guión: C. Lund. Protagonista: A. Brody. Fotografía: T. Kaye. Montaje: M. Botticelli, B. A. Brown y G. Richman. Música: The Newton Brothers. Productora: Paper Street Film. EE.UU. 2011.
El director de American History X vuelve a la carga con El profesor. Un drama que toca los mismos temas, la familia, la paternidad, el colegio, la marginalidad, la adolescencia, etc., aunque no los mismos aspectos.
La historia es un drama de purificación típico pero se salva de ser un producto industrial mesmérico más en que tiene carácter autobiográfico y el gran trabajo de los actores. El primer punto dota a la historia de una profundidad y una intensidad que disimula muy bien que la historia no tiene nada que lo diferencia de un drama femenino de sobremesa. El segundo punto da verosimilitud y solidez a los personajes, cosa muy importante en un drama porque la clave de este es que los protagonistas importen al espectador. Aunque se alaba la interpretación de A. Brody a mi no me parece nada especial. Correcta. Su papel no es muy difícil aunque exige ser un actor competente. A mi me han encantado la de J. Caan, maravilloso como el alivio cómico del drama, lástima que la cirugía estética lo haya deformado, y las adolescentes: S. Gayle y B. Kaye (la hija del director). Ambas lo dan todo y están valientes en papeles duros incluso para adultos.
Estas cosas enmascaran, además de lo típico del guión, la falta de profundidad en el protagonista que hace que sea el personaje más extraño de todos y que la peli dura un poco de más. Está por debajo de los estándares actuales (no llega a los 100 minutos) pero hay escenas poco trabajadas que restan intensidad al conjunto.
Así pues, El profesor es un drama sólido e intenso, nada nuevo bajo en el sol salvo por la verdad y el desgarro de las interpretaciones. Una película recomendable aunque no es una historia agradable.
Valoración: 6. Bien.