Título original: La délicatesse. Director: D. y S. Foenkinos. Guión: D. Foenkinos. Protagonistas: A. Tautou y F. Damiens. Fotografía: R. Chevin. Montaje: V. Bruant. Productoras: 2.4.7 Films, France 2 Cinema y StudioCanal. Francia 2011.
La delicadeza es otra película francesa que ha acabado en nuestras pantallas porque el cine gabacho está ahora de moda entre nuestras fronteras culturales. Sólo esto puede justificar que una película tan mediocre e industrial nos haya llegado.
Esta película no es más que otro film romántico para mujeres. Nada nuevo y todo insoportable para todo hombre que se precie, pero al menos afronta el tema con más originalidad y espíritu poético que las películas de este género estadounidenses. Buenas ideas son que empiece donde termina la típica película romántica y que el enamorado sea alguien feo y soso. Lo malo es que al final los directores no saben qué hacer con ello así que tiran por los caminos trillados de modo que todo el potencial de una pareja dispar, ella, jefe y atractiva, y él, subordinado y gris, tanto por su originalidad (más en un género tan ideal como es este) como por los prejuicios que los feos tienen que sufrir en todo momento, apenas aparece en el film.
Así pues, La delicadeza es una película que va de más a menos a media que la historia se va vanalizando y vulgarizando de tal modo que ni unos competentes actores ni una dirección con cierta personalidad y finura pueden rescatar al espectador del aburrimiento. Demasiado poco, demasiado flojo y demasiado convencional es lo que caracteriza a este film de tal modo que no merece la pena. Si al menos se hubieran acordado del humor.
Valoración: 3. Sin interés.
LOS COMENTARIOS (1)
publicado el 10 julio a las 00:52
Seguramente sera que el cine francés supera con creces al español siendo una gran meca de actores. No creo que sean justas las palabras que dedicas a este film ya que de entrada te dicen que es una comedia romántica. Es decir que no hay ni tiros ni sangre ni un super-héroe va a salvar el mundo en la última escena. Es como el que dice: si no te gustan la patatas no las pidas ¿no?