Reseñas: Megalex

Viernes, 3 de diciembre de 2010

La ciencia ficción es terreno abonado para mostrar inmensas megalópolis, donde un “gran hermano” dicta las reglas de una sociedad distópica, donde rige una utopía perversa y pervertida. Desde Platón, hasta Matrix, hemos visto el Mundo Feliz de Aldous Huxley o el extremo 1984 de Orwell, pasando por las sociedades descritas en el cyberpunk. En todos los casos, tenemos tecnología, control del Gran Hermano y a la peble controlada por drogas o placeres, cuando no dominada por el terror.

Megalex, de Jodorowsky, retoma el tema y nos vuelve a mostrar la degeneración de la sociedad y del género humano, a la que la tecnología no parece sentarle tan bien como parece.

Reservoir Books nos trae el integral de Megalex, obra publicada en tres partes y que tuvo su inicio en el año 2000 (si no recuerdo mal, Matrix comenzó en 1999, otra de esas adaptaciones de Un Mundo Feliz y la Caverna de Platón), siendo publicado inicialmente en España por Norma Editorial. Ahora podemos leerlo de un tirón, en un formato cómodo y por un precio muy competitivo, 17,9€, algo mas barato que el cofre de Norma con los tres volúmenes por separado aunque, bien es verdad, lo encontramos en un tamaño inferior que el original.

Megalex nos habla de una sociedad en la que está prohibido el trabajo y en la que la droga es obligatoria. Como ocurre en Un Mundo Feliz, la reproducción está prohibida, siendo los nacidos meras réplicas con una duración de cuarenta años, edad que puede alargarse si perteneces a otras clases sociales de mayor rango. La naturaleza es algo prohibido y todo el planeta donde transcurre la acción está bajo un régimen tecnocrático corrompido. En un escenario así, donde el control es casi absoluto por parte de unos pocos, resisten dos focos de resistencia, donde la naturaleza, por medio del océano y el bosque, consigue a duras penas sobrevivir.

La historia tiene todo lo bueno de Jodorowsky, quien acompañado por Fred Beltran, consigue mostrar de nuevo paradigmas como la lucha entre tecnología y sociedad, los regímenes totalitatorios o la llegada del mesías. Todo ello con el toque magistral de Fred Beltran, con un dibujo preciosista y cuidado al detalle. El guión, como el dibujo, juega con reproducir imágenes reconocibles, como ese mundo al estilo Estrella de la Muerte de La Guerra de las Galaxias, o la bruja malvada del cuento. Esos dos elementos, están presentes en la portada que la editorial propone para el integral.

Megalex no propone nada que no hayamos visto antes, pero merece la pena leerlo.