Reseñas: Wolfskin

Glénat publicó a finales del pasado año, el tomo recopilatorio de la miniserie Wolfskin, obra de Warren Ellis y Juan José Ryp. Publicada originalmente por Avatar, la miniserie constaba de tres números y un anual, dibujado por Gianluca Pagliarani.

Ellis, se aleja de los temas habituales en sus cómics, para adentrarse en las duras tierras del Norte de Europa, donde la brutalidad y el salvajismo son las credenciales del protagonista, un guerrero envuelto en pieles de lobo.

Hay quien dice que a Avatar van a parar aquellos proyectos que no tienen cabida, ya sea por políticas editoriales o comerciales, en otras editoriales mayores. Aunque, siendo bien pensados, creeremos que no es así y que la calidad de las miniseries y series que publican, estén a la altura de los autores y lo que se esperar de ellos. Por poner un ejemplo, Crossed es excelente y, aunque demasiado extrema, hubiera sido merecedora de aparecer en el sello Vertigo.

Wolfskin, sin duda, no hubiera tenido cabida en otra editorial. Una miniserie de tres números, hubiera quedado muy diluida entre la producción de Marvel o DC, además de alejarse de lo que normalmente publican. Por otro lado, los guionistas pueden experimentar y no estar sujetos a decisiones editoriales, que terminan por desesperar a muchos guioonistas.

¿De qué trata Wolfskin?

El protagonista, de quien toma nombre la miniserie, es un guerrero temido y temible, que termina por encontrarse en mitad de un conflicto en ciernes; Dos aldeas, gobernadas por dos hermanos, pugnan por acabar con el otro bando. La inclusión en cualquiera de las facciones del nuevo jugador, alteraría el equilibrio de poder. Ahí comienza todo.

La historia nos va mostrando poco sobre el personaje, y mucho de la historia de las dos aldeas. Ellis nos muestra como en el intento de ganarse al Wolfskin como aliado, los hermanos terminan por narrarnos su historia, mostrando sus debilidades y bajezas. Nuestro protagonista, deberá lidiar con las mentiras y verdades a medias que uno y otro le cuentan, además de intentar sobrevivir a los distintos ataques y emboscadas a las que se verá sometido. Con una puesta en escena soberbia, donde destacan los paisajes y los escenarios, la historia va decayendo, solo mantenida por pequeños buenos momentos, encontrados en diálogos o en la parte final, con el protagonista enfrentándose a sus propios dioses.

Guión facilón y con un argumento muy limitado, Wolfskin parece un producto menor, destinado tan solo a los mas fans del guionista. Mención aparte del excepcional trabajo de Juan José Ryp. Con un dibujo detallado, digno de un artesano, consigue que, por tan solo su trabajo, merezca la pena echarle un vistazo al tomo. Hay que reconocer que el guión le ayuda, ya que muchas de las escenas se desarrollan entre bosques y naturaleza, lo que le convierte a cada viñeta en una exhibición de paisajismo. Su nivel de detalle es tan bueno y, a la vez, tan alejado de lo que vemos en muchos cómics que, anhelamos verle trabajar pronto para una de las grandes.

El tomo se completa con un anual escrito por Mark Wolfer y dibujado por Gianluca Pagliarani y Chris Dreier. Una historia ambientada en un ambiente urbano, alejado de la miniserie. No está mal y, además, deja la puerta abierta a futuras aventuras.

VALORACIÓN

GUIÓN:5,5 DIBUJO:8

Una excelente ocasión para disfrutar del dibujo de Ryp.