Llevo tres años sin resfriarme, al menos algún resfriado que he tenido me ha durado, como mucho, 3 días… pero sin estornudar ni malestar en la garganta ni fiebre.Vamos, que nada de faltar al trabajo como veía al resto del despacho pegándose la gripe de uno a otro. De eso se deduce que mis defensas siempre han trabajado muy bien y han sabido combatir los virus desde el principio…
Pero oye, tú. Quédate embarazada y verás. Sé cuándo me resfrié… un domingo a media tarde en la terraza de mis suegros. Llevaba una chaqueta vaquera puesta y me preguntaban constantemente si tenía frío. Y la verdad es que no, evité beber algo fresco y cuando ya sí empezaba a sentir una pequeña bajada de temperatura me refrugié dentro. Yo me creía salvada…
Hasta que el lunes se me vino todo encima. Era incapaz de pensar de forma clara y todo mi cuerpo me exigía tranquilidad. Me sentía muy febril, como no me sentí nunca. Preguntaba si había termómetro, si mi frente estaba caliente… ¡¡pero nada!! Yo estaba mal. Por suerte mi jefe se compadeció de mí y me ofreció irme a casa. Ni lo dudé… me fui a casa, me puse el termómetro. ¡¡Y nada!!
Al día siguiente, entre la primera ecografía, medio día de descanso y estrés en el trabajo no pude ser consciente de cuán malita estaba, pero me ha costado mucho disfrutar de los eventos. Igual el miércoles y el resto de los días.
Hasta que el sábado por la mañana la calentura me ha explotado en la cara, literalmente. Va desde la base de la nariz hasta la comisura de los labios. Obviamente tenía mucha fiebre y por dentro.
Pero claro… ¿qué te tomas? Nunca has tenido un resfriado de tal magnitud y la verdad es que si estuviera en circunstancias más normales, me tomaría ibuprofenos como si no hubiera un mañana. No me gusta tomar muchos, pero menos me gusta pasarlo tan mal… Pero con Futuro Bebé en la barriga no quería tomar nada.En un momento de desesperación tomé un poco de propóleo (después leí que los efectos en el embarazo son desconocidos y me sentí culpable). Había leído en las recomendaciones de mi ginecóloga que sólo se recomienda tomar paracetamol, así que fui a la farmacia a pedir las dosis más bajas posibles (500 mg).
Finalmente decidí ir a la Clínica debajo de casa (donde no hace falta pedir cita). Esa mañana estaba mal, me levanté mareada, estaba más febril que nunca y la verdad es que estaba muy embotada. La doctora se aprovechó de mi malestar y coló a todos los que podía colar y cuando me atiende, tiene la desfachatez de decirme que no puedo tomar absolutamente nada (concretamente ni paracetamol)… sólo efferalgan. Cuando miras la composición, ¡¡es de paracetamol de 1gr!! Me lo ha recetado cada 4 horas. Porque estaba mal… pero a esa clínica no vuelvo.
Futuro Papá tiene la teoría de que mis defensas no pueden actuar porque también actuarían contra Futuro Bebé y el cuerpo es sabio, por lo que mis defensas están dedicadas a cuidar a Futuro Bebé y a mí… que me zurzan. Por fin estoy mejor, pero me duele la calentura del labio.