25
2014 Coaching personal // nuevos paradigmas // sociedad
RESISTENCIA AL CAMBIO (I)
Escrito por Miguel Benavent de B.
Sin comentarios

Es más que evidente que a las personas nos cuesta aceptar el cambio, en cualquier sentido. Y huelga decir que el cambio es permanente y algo inevitable en nuestra vida! Seguramente se debe a que nuestra propia capacidad de complacencia y de adaptación al medio nos exije mantener las cosas como están. Lo nuevo y desconocido que aporta cualquier cambio en nuestra vida nos da miedo y nos desequilibra…
El otro día hablaba con un amigo mío, estandarte de persona acomodada y aparentemente adaptado a su realidad cotidiana y al mundo que habita, sobre la necesidad de aceptar el cambio, como medio para mejorar y, en lo posible, acercarnos a la felicidad, aunque sea cada día un rato! En otro momento de mi vida sus argumentos y razones razonables me hubieran hecho dudar. Pero el otro día, aunque no admitió su insatisfacción ni infelicidad publicamente, decidió callar ante la contundencia y obviedad de mis palabras.
Mis comentarios iban destinados a argumentar que lo que hay ahora en el mundo no es algo beneficioso para nosotros, los seres humanos. Y que lo que hay que dejar atrás es claramente mejorable, en todos los sentidos. Aunque hablábamos de la sociedad y del mundo que vivimos, eso es aplicable también al terreno personal. Sin ir más lejos, hablabamos de la necesidad de cambiar este mundo aparentemente opulento, injusto e inhumano, cada día más. Simplemente porque no nos ha dejado tantas cosas buenas como queremos e intentamos demostrar para argumentar que debemos seguir así. A escala mundial, un mundo lleno de miseria, hambre y enfermedades, pobreza y conflictos bélicos o revueltas sociales, síntomas de un mundo que no puede seguir así mucho tiempo más…
Pero debemos recordar que el cambio empieza por uno mismo, pues el mundo no es más que la proyección de cada uno de nosotros, con nuestra ignorancia, indiferencia y inquietud! Si cada uno de nosotros no hace lo posible por ser feliz y cambiar su propio entorno, el mundo no cambiará…
Seguirá…
