Resolviendo los conflictos en el equipo de trabajo.

Los conflictos han acompañado a los seres humanos desde tiempos inmemoriales. La realidad es que donde quiera que exista un grupo de personas que interactúan entre sí, en mayor o menor medidas, surgirán conflictos.

Debemos aclarar que tener diferencias de criterios con los demás miembros del equipo, algo completamente corriente, no deriva necesariamente en un conflicto. Estos se producen cuando se rompe la armonía entre las relaciones y se produce algún tipo de desequilibrio entre las partes involucradas.

Muchas pueden ser las causas que originan conflictos entre los miembros de un equipo. Estos pueden surgir por necesidades insatisfechas, expectativas que no se cumplen como se esperaba, falta de organización y disciplina en la organización, malas actitudes de algunos miembros y muchos más.

Aunque parezca extraño, los conflictos pueden llegar a ser un aliado si se manejan y resuelven satisfactoriamente. Estos pueden redundar en un crecimiento para el equipo en general y sus integrantes en particular.

Ahora, les comparto 2vconsejos para manejar los conflictos de manera exitosa:

1. Resuelva el conflicto por medio de un proceso. Cualquiera sea el caso, nunca es saludable para las personas y la organización tratar de resolver un conflicto de modo áspero. Por regla general, se siguen varios pasos en el proceso: (1) Confrontar. Manteniendo una postura justa y respetuosa, es importante enfrentar el problema con toda honestidad. Nada se resuelve tratando de negar o evadir el conflicto. (2) Analizar. Minuciosamente se debe prestar atención al criterio de cada parte involucrada en el proceso, valorar las actitudes asumidas por cada una, y estudiar todos los hechos concretos que se dieron en medio del conflicto. Es imposible hacer una apreciación correcta de la situación, y ser justo en la decisión final, sin este análisis profundo y desprejuiciado. (3) discutir todas las posibles soluciones. Es bueno tener más de una posible solución, siempre que la situación lo permita, para tomar la más adecuada. (4) Aplicar la mejor solución al alcance. (4) Reconciliar las partes en conflicto. El conflicto termina, cuando se produce la reconciliación. Esto puede tomar algo de tiempo, pero es importante que ocurra para el bien de todos.

2. Adopte una buena actitud a la hora de solucionar el conflicto. Es importante recordar: (1) No se trata de ganar una discusión personal, sino solucionar el conflicto. (2) No es bueno quedarse discutiendo polarizadamente sobre acontecimientos pasados, sino debemos mirar hacia adelante para restaurar las relaciones. (3) No es bueno tratar de culpar todo el tiempo a los demás, sino asumir nuestra responsabilidad y errores. (4) No es bueno tratar de solucionar el problema precipitadamente, sino cuando tengamos una amplia información, una idea clara del asunto y hayamos reflexionado juntos en la solución. (5) No trate de imponer la solución, sino trabajen intensamente hasta lograr un consenso.

Nos complace muchísimo poner a vuestra disposición un conocimiento AUTÉNTICO que le ayude a caminar sabiamente por los intrincados caminos de la vida.