Respirar aire puro es una acción plagada de beneficios para la salud, ya que potencia la eliminación de toxinas, optimiza el rendimiento físico, estimula la producción de colágeno y mejora la calidad de vida.
Para llenar las fosas nasales de aire puro no es necesario viajar a escenarios lejanos y recónditos. Y es que, a tan solo 75 kilómetros de Madrid, concretamente en el municipio de San Martín de Valdeiglesias, podemos disfrutar de un jardín botánico llamado El Bosque Encantado, un paraje plagado de naturaleza, aire puro e imponentes esculturas vegetales.
Seres fantásticos hechos con plantas
Además de estar ubicado en un escenario de ensueño, El Bosque Encantado es todo un deleite para la vista debido a las figuras que habitan en su interior.
Unas esculturas vegetales talladas con plantas y arbustos entre las que encontramos criaturas mitológicas, animales salvajes o seres fantásticos que parecen haber salido de la famosa película Eduardo Manostijeras.
Más de 300 esculturas vegetales
El Bosque Encantado se ha convertido en un jardín botánico único en Europa debido a que alberga un total de 320 esculturas vegetales.
Unas figuras que sorprenden por su gran tamaño y su perfección y que, además, han sido esculpidas por los mejores artistas de arte topiario, nombre con el que se conoce a la creación de esculturas vegetales.
Riachuelos, cascadas y aire puro
Paseando por los senderos de El Bosque Encantado no solo es posible contemplar esculturas vegetales de gran belleza.
Los visitantes también tienen la oportunidad de cuidar su salud respirando aire puro, así como gozar de la naturaleza a través de las cascadas, riachuelos y exposiciones de cactus, bonsáis y plantas aromáticas que forman parte del parque.
Un jardín botánico de 25.000 metros cuadrados de superficie ideal para las familias donde tanto los niños como los adultos pueden pasarlo en grande admirando las esculturas o perdiéndose entre sus mágicos laberintos.
Una escultura en miniatura de recuerdo
Si te animas a visitar El Bosque Encantado, podrás disfrutar de un día perfecto y marcharte a casa con un bonito recuerdo.
Macetas en miniatura con tu escultura vegetal favorita, bonsáis, tillandsias y colecciones de minerales son algunos de los obsequios que podrán decorar tu hogar tras visitar este hermoso jardín botánico.