Respira, Relájate y Sigue tu Camino…por Mel

Hola amig@s, estas dos últimas semanas están siendo muy emocionales para mi. Siempre digo lo muchísimo que me encanta conocer personas, estén donde estén. Cualquier rincón es perfecto para encontrar una maravillosa persona que esconda en sí, mucho aprendizaje, que te haga sentir y además sonreír también, ¿verdad? es algo único, y placentero de disfrutar. Yo lo dejo catalogado, como uno de los placeres de la vida más importantes y esenciales...

Esta semana tengo el placer, de compartir con vosotros. Una colaboración que su valor es incalculable. Es una aportación de "lectura obligatoria" con la que, estoy segura, aprenderéis y creceréis en este campo quizás para algunos Tabú. Y que Mel, nos ayuda a afrontar con determinación, fuerza y unos tips excelentes para todo el proceso. ¿Pero quién es Mel? continúa leyendo y al final, te dejo una descripción y todos los medios donde puedes encontrarla.

Hay veces en la vida que nos toca soportar un dolor excesivamente grande y en el momento en el que eso ocurre, creemos que no vamos a ser capaces de superarlo. Creemos que no vamos a ser capaces porque tenemos el corazón encogido, estamos repletos de tristeza y el malestar nos ciega. Esas sensaciones, por malas que parezcan, confirman que somos humanos y que no somos un muro de hielo que jamás se rompe. Ese dolor excesivamente grande como puede ser la muerte de un familiar, de un amigo, de una pareja, de tu perro de toda la vida o cualquier ruptura que haya causado innumerables daños emocionales, no va a desaparecer, pero finalmente, muy lentamente nos daremos cuenta que nuestra vida sigue y hay que luchar por ella. Y cuando nos damos cuenta de eso, es que habremos superado la famosa Fase del Duelo. El Duelo es el proceso de adaptación emocional que sigue cualquier pérdida (separación en la pareja, la pérdida de un empleo, la pérdida de un ser querido...) suele durar entre dos y trece semanas, aunque puede llegar a alargarse hasta un año si la pérdida era de una persona muy allegada. Consta de cinco fases:

1. Fase de Negación: Consiste en no ser consciente y de negar la situación que ha ocurrido o la pérdida.

2. Fase de Enfado, Indiferencia e Ira: Consiste en decirse a uno mismo que podía haber evitado la pérdida, que podía haber hecho más por la relación, que podía haber luchado más y las cosas serían muy diferentes. Se trata de buscar la culpabilidad de la propia persona.

3. Fase de Negociación: Se trata de hablar con las demás personas del entorno, con familiares, amigos, conocidos... y se busca una solución entre todos para la situación.

4. Fase de Dolor Emocional: Llega la tristeza, el malestar, los llantos. También puede haber episodios depresivos pero que deberían ir desapareciendo con ayuda de profesionales o técnicas de relajación.

5. Fase de Aceptación: Se asume la pérdida y se intenta mirar hacia el futuro. Se crean nuevos hábitos, nuevas experiencias y nuevos horizontes.

Pero como decía antes, llegar a la Fase de Aceptación del Duelo no es sencillo. Y hay personas, que dependiendo de la situación en la que se encuentren les cuesta más o menos llegar hasta ella que a otras, la cuestión es no rendirse. Y con no rendirse, no me refiero a que no podamos llorar, a que no podamos estar tristes y a que no nos duela lo que estamos pasando, ni mucho menos. Lo que quiero decir, es que ante la pérdida de cualquier persona o relación, hay que hacer cosas con las que nos sintamos agusto con nosotros mismos: si no nos apetece estar con nadie durante una semana o dos, no tenemos por qué hacerlo hasta que nos sintamos más cómodos, no hay que olvidar que las personas que de verdad quieren nuestro bienestar estarán ahí hasta que estemos listos y preparados de nuevo. Si por el contrario lo que nos hace estar mejor y más arropados es salir con los amigos o familiares, adelante. Pero sin ninguna presión. Lo que sí es bueno y positivo es intentar buscar algo nuevo que hacer. Alguna cosa que llevásemos tiempo queriendo hacer y que todavía no la hayamos probado: leer libros que están cogiendo polvo en la estantería, ver esa serie que siempre teníamos ganas de ver, hacer ese curso gratuito online o presencial que tanto nos llamaba la atención...

Y así, sin que nos demos cuenta, van pasando los días. Y aunque en un primer momento no seamos muy conscientes, cada vez vamos llorando menos, cada vez nos vamos sintiendo menos tristes, ese malestar que teníamos hace tiempo va desapareciendo lentamente y esa sensación de vacío y de no tener un rumbo fijo poco a poco se no está yendo de la cabeza. Y entonces, nos habremos convertido en unos supervivientes, en unos luchadores y en unas personas que han sido capaces de soportar un dolor extremo y que siguen su camino en la vida. Eso sí, que hayamos llegado a la Fase de Aceptación de nuestro propio duelo, no significa que hayamos olvidado al ser querido, ni que no pensemos en nuestra pasada relación. Aceptar es asumir, no olvidar. A partir de aquí, lloraremos, pero también nos reiremos al recordar momentos inolvidables que hemos pasado con esa persona y sí, lo echaremos de menos, por supuesto, pero de una forma bonita y nostálgica. Respira, relájate y sigue tu camino, porque aunque a veces parezca difícil, detrás de las tormentas, siempre está el sol.

Como veis, es una chica con muchísimo sentimiento y capaz de enseñarnos cómo afrontar momentos difíciles de la mejor forma. Ya que, no debemos olvidar que, un ser que se va... ¿quiere que estemos mal por él? no, ¿verdad? pues continuemos, crezcamos y llevar al pie de la letra lo que nos cuenta Mel, de corazón y veréis, una mejoría notable en vuestras vidas.

Pero Omayra, ¿Quién es Mel?

¡Tranquilidad! sabía que querrías que llegara este momento, que estabas deseando saber quién nos aporta algo con tantísimo valor y aquí te lo cuento:

Risueña, encantadora y muy buenísima persona. Esta chica, os enseñará desde lo más profundo de su corazón. Además de, que con ella, disfrutaréis de forma peculiar de la lectura, con sus reseñas, entrevistas y/o recomendaciones. ¡No os perdáis conocerla! de verdad... ¡Os encantará! Y os enternecerá conocerla, es magnífica. Con el añadido de que yo personalmente me considero enamorada de su blog y su personalidad única y especial.

¿Dónde podemos encontrar a Mel?

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Tanto Mel como yo, esperamos que os haya gustado el artículo, que hayáis acogido a vosotros, lo útil que es y que, como bien dice....

Un abrazo,

Omayra Montes y Mel.