Responsabilidad

- Gutiérrez dice que se va a abstener.- me quité el móvil de la oreja y lo miré como si se le hubiera roto el auricular.
- ¡Venga ya!- ah, incrédulo de mi...
- Te lo juro. Se lo está diciendo a todo el que quiera oírlo.- "¿Se atreverá de verdad?", pensé...
Y se atrevió.

Escuche música mientras lee, me lo agradecerá

Cuando la amiga "A." me llamó, como hace casi todos los jueves, para contarme esas cuitas imprescidibles de los pasillos de Ferraz que, nos guste o no, marcan ahora mismo la política del gobierno, somos muchos los socialistas, yo diría que la inmensa mayoría - dentro de Ferraz también-, que, ni comulgamos con la política actual, ni respaldamos de ninguna forma o manera lo que se está haciendo, sobre todo porque no hay diox que lo entienda. En mi caso hay que sumar que ni siquiera entiendo cómo es posible que exista un solo socialista que pueda defender las políticas de mínimos impulsadas por el gobierno. Sólo con pensarlo se me revuelven las tripas.
Yo amo a mi partido, pero eso no significa que tenga que apoyar burradas, que ese amor me obligue a apoyar un gobierno determinado cuando no hace lo que debiera, y eso es extensible al grupo parlamentario socialista, que hace seguidismo, no socialismo, que permite que el gobierno siga mirándose en el ombligo de Alemania, o impulsando reformas laborales a la austriaca, cuando los parlamentarios saben a ciencia cierta que no es ahí donde se debe mirar, no es esa la meta. Lo sabíamos en el 82, lo sabíamos en el 86 y lo sabíamos en el 90. Fue por eso por lo que se hizo el esfuerzo presupuestario que dio como resultado una de las mejores sanidades públicas de toda Europa, políticas de becas, eduación pública y universades de calidad... fue a eso a lo que se refería el Ministro Solbes cuando dijo que hacía falta doblar la inversión para volver a los niveles de sanidad y educación pública que había en 1996... y la cuestión es ¿Dónde nos mirábamos en el 82, en el 86 y en el 90? ¿En Alemania? Pues va a ser que no.
La abstención de Antonio Gutiérrez no es gran cosa, no vayan a creer, sólo una pequeña ruptura de la disciplina de grupo parlamentario, pero es sintomática. Como bien dice la amiga "A.", aquellas caras sonrientes de 2004 han ido cambiando por las expresiones adustas de los que salen de los despachos y reuniones, la camaradería se ha cambiado por el esquinismo, la barbilla alta ha desaparecido dejando mentalidad de animal acosado. La inquina entre prensa y NET es tal, que ya ni siquiera intentan comunicarse y Organización brilla por su ausencia, claro que, cuando aparece en escena deja cosas como el protocolo de uso de internet para afiliados... que los propios de Ferraz no acertaban a creerse, por no hablar de los agujeros negros de Industria, Cultura y Vivienda en cuya descoordinación nadie tiene mondongos de meter mano. Las ruedas de prensa de los viernes ya no despiertan aplausos, sino bajadas de ojos, miradas hacia otro lado y gente que se mesa el pelo. El trabajo por el Partido se ha convertido en el trabajo para el gobierno... y el gobierno no es el PSOE, como el PSOE no es el socialismo.
Hay quien dice que Antonio Gutiérrez ha cambiado la disciplina de partido por su credo de viejo sindicalista... una forma como otra cualquiera de dar menos importancia de la que tiene a su abstención, de dar a entender que es un sindicalista reconvertido. Cuando lo cierto es que se ha abstenido porque la reforma laboral NO es de izquierdas ni socialista, se ha abstenido porque ES responsable para con el electorado que le votó, su responsabilidad es esa, no otra, y sería bueno que los parlamentarios de la bancada del PSOE tomaran nota, porque la oligofrenia que vienen mostrando para con la ciudadanía que les ha puesto donde están - no lo olviden- costará el gobierno y sus sillones, entregando durante muchos años un Estado de Bienestar, ya de por si bajo mínimos porque este gobierno no ha querido poner freno a los desmanes presupuestarios de las diferentes Comunidades Autónomas - tampoco lo olvidemos-, en manos de aquellos que, en esas mismas Comunidades Autónomas, lo han deconstruido. Y eso tiene un nombre, IRRESPONSABILIDAD.
Todo esto tiene un costo que, es evidente, no van a pagar esos parlamentarios y senadores del PSOE que han votado favorablemente por una reforma laboral penosa, descastada, inútil y harapienta, lo vamos a pagar los españolitos de a pie, nuestros hijos y nuestros nietos... y agárrense los machos, porque nos enfrentamos a, como mínimo, seis años de neoliberalismo rampante y eufórico, los dos que quedan y los cuatro que vendrán.
A ver con qué cojones vais a pedir el voto a los ciudadanos... ¿¿¿Con una güitarra y un gorro en la Gran Vía???
Tele MACO
Un artículo, un vídeo

Buenas noches, y buena suerte...
Ôo-~