Hace años que está de moda "restaurar", "tunear", "reciclar" muebles y enseres viejos, que a veces no son simplemente "viejos", sino antiguos (con más de 100 años), piezas únicas hechas por artesanos con todo el esmero y mimo, y que lamentablemente, con restauraciones no científicas pierden su valor histórico-artístico (a veces también su valor económico).
Un mueble de nuestros abuelos puede ser una joya, no siempre no le damos el valor que merece. Para que nuestro afán de "restaurar y transformar en shabby chic" todo no se nos "vaya de las manos", vamos a indicar los principios básicos de una restauración científica:
MÍNIMA INTERVENCIÓN
Los tratamientos deben ser siempre los más reducidos posible e inocuos. Si modificamos más del 30% de la pieza, pierde completamente su valor (incluso su función en ocasiones).
RESPETO POR EL ORIGINAL
No falsificando, ocultando, ni inventando partes o zonas perdidas.
Por lo tanto, si añadimos piezas que faltan, debe verse que es añadido (por eso se usa un material de distinto color o textura ), si se unifica la parte añadida o "inventada", podríamos considerar que el original pierde su valor (incluso que es una falsificación).
REVERSIBILIDAD
Los materiales aplicados deben ser fácilmente eliminables, Según esto, una pintura acrílica (base de agua) o cera se puede eliminar fácilmente sobre un mueble de maderas nobles (que se ha preferido pintar de blanco porque "es demasiado oscuro" según la moda actual); si aplicamos pinturas y barnices sintéticos, su eliminación no sólo supone más trabajo, sino que puede dañar la pieza.
DISCERNIBILIDAD DE LA INTERVENCIÓN
Toda la intervención estética de reintegración debe ser fácilmente diferenciable y reconocible, sin restar protagonismo a la obra original.
Esto significa que siempre debe verse el original (reservando una zona de cata, por ejemplo) y documentar (fotos, vídeos) el proceso para poder devolver su aspecto original al objeto en otro momento.
Si quieres conservar esos muebles heredados, hazlo teniendo en cuenta que es necesario emplear materiales compatibles, reversibles, homogéneos y de buena calidad, ser conscientes de nuestras limitaciones como restauradores, realizar una exhaustiva diagnosis previa y documentar todo el proceso.
Si os gusta este tema, recomiendo este blog:
https://www.anticuable.com/blogs/news/restauracion-y-conservacion-de-un-bien-cultural
Espero que os sea útil esta lectura.