No ha estado mal el verano, sobre todo el mes de julio que despaché con nueve novelas y es que mis primeros días de vacaciones fueron realmente tranquilos, de descanso total, mucha playa y mucha lectura. En agosto ya flojeé un poco más y no solo porque tuviera que trabajar un poco durante el mes, sino porque el tiempo que estuve de vacaciones fue con bastante más actividad lúdica y claro, con tanto jaleo y diversión, queda poco tiempo para leer.
Veamos cuáles han sido esos libros:
- Los ingratos. Pedro Simón.
- Nuestra casa. Laura Candlish.
- La casa de las novias. Jane Cockram.
- Su último día. Shari Lapena.
- El oscuro adiós de Teresa Lanza. Toni Hill.
- Una sala llena de corazones rotos. Anne Tyler.
- El sótano de Oxford. Cara Hunter.
- Cierra todas las puertas. Riley Sager.
- La tienda de la felicidad. Rodrigo Muñoz Avia.
- Donde haya tinieblas. Manuel Ríos San Martín.
- Los ausentes. Juana Cortés Amunarriz.
- La congregación. Miguel Conde-Lobato.
- Disfraces terribles. Elia Barceló.
- Lo que la marea esconde. María Oruña.
Los tres primeros los leí antes de marcharme de vacaciones y aunque como podéis ver hay un poco de todo, el thriller, la novela negra y el misterio siguen siendo los ganadores. Eso sí, con distintos niveles de satisfacción. Ahora solo me queda ponerme a reseñar, aunque como ya os comenté la mayoría irán en formato de minireseña, pero lo cierto es que estoy bastante vaga para sentarme delante del ordenador y eso que tan solo tendría que transcribir las breves impresiones que fui anotando conforme terminaba de leer.
¡Vamos a por septiembre!