Últimamente no son muchos los momentos que encuentro para inmortalizar gracias a Instagram, pero alguno que otro hay que merece la pena...
Compras inesperadas, relojes, zapatos y sobre todo buena gastronomía son algunos de esos placeres que merecen la pena guardar como recuerdo.
Me gusta especialmente la primera de las fotos, pues curiosamente el efecto de luces es totalmente natural, sin ningún tipo de retoque en este sentido.
En otra foto podéis ver mi último juguetito, mi Nikon D3100 con la que espero poder ofreceros mejores imágenes en los próximos reportajes y aportes.
Ya sabéis que podéis encontrar más fotos en la sección Instragram del Blog.