Panamá exigió hoy a Ecuador devolver un barco cargado con drogas, luego que el país del istmo retirara a su embajador en Quito en una escalada más del deterioro de las relaciones bilaterales, anunció hoy la cancillería panameña.
Fernando Núñez Fábrega, canciller de Panamá
El embajador José Noriel Acosta fue llamado a consultas la semana pasada “para expresar su malestar por la reiterada negativa del gobierno de Ecuador a devolver a Panamá el barco Doria”.
La nave, cargada con 799 kilos de droga, fue interceptado por Ecuador el 13 de octubre pasado en aguas internacionales, “en abierta violación de la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar”, indicó un comunicado de la cancillería.
Después de la detención de la nave, con cinco tripulantes, Panamá otorgó asilo político a Lara el 22 de octubre pasado.
El ex diputado, quien llegó a Panamá el 15 de octubre, está acusado de vínculos con el asesinato de tres personas en 2011.
En un intento por demostrar la culpabilidad de Galo, una misión de Ecuador de alto nivel de 15 personas -incluidos ministros de Estado- visitó Panamá en octubre, pero sus argumentos fueron desechados por las autoridades panameñas.
Núñez Fábrega dijo que autoridades ecuatorianas “dieron a entender diáfanamente que esto (la negativa de entregar el barco) estaba ligado a una nueva petición que está formulando Ecuador para que se cancele o revalúe el asilo político dado a Galo Lara”.
Asambleista Galo Lara
El canciller panameño, Fernando Núñez Fábrega, dijo este lunes en una rueda de prensa que el Gobierno del Ecuador ha "pretendido vincular" el caso de la embarcación con sus pedidos de extradición del político opositor ecuatoriano Galo Lara, quien recibió asilo territorial en Panamá el pasado 26 de octubre. “Si este no es el caso, este es el momento en donde la República de Ecuador puede entregar el barco a nuestra jurisdicción y nosotros gustosamente pediremos las disculpas por el mal entendido”, señaló.
Núñez Fábrega descartó que Panamá vaya a reevaluar el asilo para Lara y también desechó que los presidentes de los dos países puedan conversar sobre el tema porque “es jurídico”.
“Este tema es jurídico, ellos están violando normas de las cuales somos signatarios. Eso no está sujeto a interpretación jurídica, no puedes capturar en el siglo XXI un barco en aguas internacionales, retener a unas personas en base a un asilo político concedido”, añadió.
Las relaciones entre Panamá y Ecuador están deterioradas desde hace meses cuando Quito dejó acéfala su embajada en Panamá molesto por las constantes declaraciones del ex presidente ecuatoriano Abdala Bucaram -asilado aquí- en contra del gobierno ecuatoriano.
De hecho en octubre, Panamá admitió esa falla de Bucaram al llamarlo a evitar declaraciones políticas.
“Hasta que este problema no se resuelva, tenemos una situación un poco incómoda, porque los interlocutores no están presentes”, admitió el director de Política Exterior de la cancillería, Floriel Garrido sobre las relaciones bilaterales.