El día anterior hablamos de los gastos fijos y mencioné los gastos variables. Quizás hayas echado de menos una breve explicación de lo que se puede considerar gasto variable, ya que los he mencionado. Pero es un concepto que implica mucho más que una breve explicación. Y como es tan intenso, vas a trabajar un poquito en estos conceptos.
Gastos Variables
Según el método Kakebo, los gastos variables se dividen en los siguientes:
- Supervivencia
- Ocio
- Cultura
- Extras
Un mismo gasto puede estar en una u otra categoría en función de la intención que has puesto al desempolvar el dinero, así que esta vez la tarea es tuya porque te implica a ti única y exclusivamente.
Haz una definición extensa de cada uno de estos conceptos:
- Gasto variable
- Supervivencia
- Ocio
- Cultura
- Extras
Para ayudarte y que no sea una tarea titánica al encontrarte con una hoja en blanco, yo te voy a dar el resumen y tú haces la definición extensa. Al revés que en todos los retos que habrás hecho antes o en las tareas que habrás realizado, pero aquí se trata de darle la vuelta a lo que sientes con tu dinero y los sentimientos son tuyos.
Gasto variable: todo aquel gasto imprevisto que realizas a lo largo del mes
Supervivencia: todos los gastos variables que haces para mantener tu subsistencia o la de tu familia.
Ocio: todos los gastos variables que te generan bienestar, pero que serían evitables. Por ejemplo, ir a un restaurante, tomarte el café de las mañanas, comprarte un vestido nuevo.
Cultura: todos los gastos variables que expanden tu mente. Por ejemplo, libros, teatro.
Extras: todos los gastos variables que se pueden considerar inevitables, pero no van a gastos fijos. Por ejemplo, comprar un mueble para la casa, hacer un regalo a un familiar.
Vamos a aprovechar que estás elaborando estos conceptos para ir un paso más allá y vas a escribir el presupuesto que crees que te gastas en cada categoría. Sin mirar las cifras reales, sino desde la emoción de cuánto te gustaría gastarte en cada cosa teniendo presente los ingresos que generas.