Retroanálisis: Super Mario Land para Game Boy

De todos es sabido que la popularidad del fontanero más famoso del mundo, Mario. Por ello es lógico, que la estrella de Nintendo llegara por todo lo alto a la pequeña de la familia. No sería hasta el año 1989 cuando llegaría este título a los mercados japonés y estadounidense, teniendo que esperar en Europa hasta finales de septiembre de 1990. El mito salía a disposición del gran público, pero ¿sería tan laureado como sus versiones en la sobremesa?
La principal novedad de esta franquicia, la cual constó de dos entregas, siendo la segunda el culmen, y un spinoff protagonizado por el némesis de Mario, Wario, sería que en su primera parte no la llevaría el creador del "bigotudo", Miyamoto, sino que Gumpei Yokoi,uno de los grandes diseñadores y desarrolladores de videojuegos de todos los tiempos. Este prestigioso creador lo conoceréis por las míticas Games & Watch, Game Boy, Metroid, Kid Icarus... o por supuesto la ya archiconocida Virtual Boy.
Ya centrándonos en el juego que nos ocupa, Super Mario Land, tenemos novedades que lo diferenciarían mucho de sus versiones de sobremesa. Estas novedades recudirían en que esta entrega olvidaríamos a la Princesa Peach para rescatar  a Daisy. También nuestro principal enemigo ya no sería Bowser, sino un extraterrestre que quiere secuestrar a la ya mencionada víctima. De todas formas, no olvidemos que lejos de algunas de sus novedades, dicho sea de paso, anecdóticas, nos encontramos con un Super Mario Bross clásico adaptado a la pequeña Game Boy. 

Niveles que recordaremos a los del primer Super Mario, fases con vehículos voladores que nos recordarán a los más clásicos matamarcianos y una dificultad muy ajustada para que todos los públicos pudieran disfrutar del juego sin problemas, son las principales bazas de un juego que aun a día de hoy, sigue siendo todo un referente de cómo hacer una obra redonda dentro del terreno de las plataformas. Cierto que su duración es bastante escasa, en menos de una hora podremos haber pasado el juego completo, pero también hay que tener en cuenta que no tiene ninguna forma de guardarse, siendo un juego que cada vez que lo rejuegues se convertirá en todo un desafío para ti, ya que querrás mejorar tus tiempos y tu puntuación cada vez que lo cojas en esa partida rápida de metro o autobús.
Una más que recomendada compra para todos aquellos que no disfrutaran el juego, ya que su simplicidad y diversión directa que te ofrece el juego sigue siendo a día de hoy una gran forma de pasar un rato muy entretenido en cualquier lugar.