Retrocesos: Miedos nocturnos
abr2013 09
posted by Zulema de Mamá es bloguera on Aprendiendo con dos enanos
Parece que a sus ocho años, bastante tiempo después de haber superado esta etapa hemos tenido un pequeño retroceso que no sé cuánto durará. Los miedos nocturnos vuelven a nuestra vida impidiéndonos disfrutar el dormir la noche del tirón, quién me lo iba a decir tanto tiempo después…
El motivo aún lo desconozco, de hecho por primera vez parece ser un miedo al ver oscuridad al despertarse ya que me pide que encienda alguna luz. Hace un tiempo pasamos una etapa similar pero con un origen diferente, antes eran pesadillas. Casi cada noche el peque soñaba que nuestra casa se venía abajo y despertaba completamente aterrorizado. Supongo que fue debido a alguna imagen que sin querer debió ver en el noticiario cuando hubieron terremotos.
No fue algo fácil de superar, costó mucho tiempo pero sobre todo mucha paciencia y comprensión. El niño despertaba realmente aterrorizado en busca de un poco de seguridad, y sólo la encontraba a mi lado. En ese entonces volvimos a las noches del colecho, que no es que solucionaran el problema pero sí nos evitaba que el niño pasase más tiempo angustiado, de esa forma despertaba y yo ya estaba ahí. Se daba cuenta de que fue un sueño más, se abrazaba a mí y volvíamos a dormir.
Desde hace cosa de una semana se despierta cada noche pidiendo que le encienda una luz, sin motivo aparente. Por más que he hablado con él no sabe darme una razón sobre la cual podamos trabajar para superarlo, simplemente siente miedo y él tampoco sabe el porqué. Así que viendo la situación que se nos presentaba durante otro periodo de tiempo he optado por las luces de pared que tanto he visto y escuchado hablar de ellas, más colecho nuevamente. Dormir a mi lado le da más seguridad y no pasa esa angustia innecesaria.
El mejor método para combatir estos miedos infantiles es brindar la seguridad que nos están pidiendo, estar a su lado y poder ayudarles. Son momentos en los que ellos de verdad lo están pasando muy mal y nos necesitan, necesitan saber que siguen estando protegidos aún cuando todo está oscuro y no pueden vernos. ¿Alguna vez te has despertado angustiado/a por una pesadilla?¿Verdad que te gustó o hubiese gustado tener a alguien al lado para asegurarte de que todo ha sido un sueño y nada ha pasado? Pues eso mismo es lo que sienten nuestros hijos, incluso diría que en mayor intensidad ya que no tienen la madurez necesaria para entender muchas cosas, ellos suelen magnificar bastante las cosas porque así las sienten en ese momento.