Os quiero hablar de mi recién descubierta pasión por los lip glosses. Normalmente son productos pegajosos que evito porque me parecen muy incómodos, pero he probado uno que me ha encantado. Son los Lip lacquers de Rimmel, y tienen un nombre muy llamativo: Apocalips.
Los vi por casualidad en El Corte Inglés, y se presentan como la última novedad publicitada por Kate Moss. Con un pequeño descuento por estar en época de rebajas me lancé y compré dos colores: Apocaliptic y Stellar. El primero es un tono fucsia muy llamativo, el segundo tiene un tono más coral anaranjado.
En total existen ocho colores que van desde el nude, y tonos rositas claros, hasta el fucsia de Apocaliptic o un rojo brillante llamado Big Bang.
Lo que más me ha sorprendido es su fórmula, tiene una consistencia perfecta y no es pegajosa para nada. Cremoso y de color opaco, aporta un efecto lacado con color intenso y mucho brillo.
Lo mejor es que no he notado que me reseque los labios.
Y en cuanto a duración, aguanta bastantes horas en los labios. Es un pigmento tan potente que se queda impregnado en el labio, eso sí, hay que tener cuidado porque es fácil que al rozarnos con cualquier cosa el color se traspase.
El aplicador también me ha gustado mucho. Tiene un pequeño hueco en el medio en el que se queda el producto, así nos podemos pintar completamente los labios de una sola pasada.
Con todo, creo que estos glosses son fantásticos. Me gustan mucho los colores disponibles, el packaging, la fórmula del producto y el precio: 9,75 euros.
Aquí puedes ver el video con mi review: