Revista Maternidad

Revisión 2 años

Por Estanjana @estanjana
La semana pasada no os hablé demasiado de como me/nos iba la semana, así que intentaré hacer memoria y haceros un resumen.
Uf! por donde empiezo? primero de todo os recordaré el sorteo que voy a realizar el miércoles, aquí veréis las bases, tenéis hasta el mismo miércoles para apuntaros.
El jueves nos tocó revisión de los dos años (mes y pico después de cumplirlos, eso me pasa por no llamar con más antelación, esperando a ver cuando empezaba mi compañera de curro de la baja maternal, pero bueno...) Me pedí el día, total no te agradecen ningún esfuerzo, porque la otra opción era llevarme al niño a currar y esta vez no me apetecía nada. Total que fuimos al pediatra, la enfermera majísima nos atendió primero con lo que estanjanito no empezó a llorar según entramos (como otras veces a la que reconoce al doctor) estanjanito estuvo jugando con los chisme que tienen en la consulta, la enfermera mientras me hacía preguntas habituales (come bien? de todo? duerme bien? hábitos...) me preguntó si tenía alguna preocupación (pregunta que a simple vista parece una chorrada, pero me parece muy importante para que no se convierta en preguntas tipo test y ala pa' casa) mi preocupación: el pitilín, que la piel se le tira menos para atrás de lo que hacía, es decir, cero, pero como la ultima vez el doctor ya me comentó que hasta los tres años no es preocupante pues me preocupa pero sin exceso.
Aich que me estoy liando y solo voy por las 9.30 y de la mañana del jueves!! Resumo: todo bien, ha ganado peso y estatura dentro de su evolución de bajo percentil. Y a la enfermera le entusiasmó (y a mi me alegro eso) que todavía le diese pecho a estanjanito, bueno, ya os contaré eso, porque llevamos dos días sin toma.
Con el médico tampoco lloró, aunque estanjanito se mosqueó un poco cuando le tocaba la barriga y le miraba los oídos, pero muy bien, y se lo hice sentir a estanjanito para que la próxima tampoco llore. Dentro de un año, si no hay ninguna enfermedad intermedia (ojalá). Nuestro pediatra me gusta mucho, aunque es algo serio, se ve que le gusta su trabajo, está bien informado y te escucha, aunque a veces no sé si le aburro, procuro ser cauta para no agobiarle. Suele atenderme y hablarme muy bien. Ahora nos toca ponernos un poco más serios respecto a lavarse los dientes, aunque sin forzar. Y que lo de que no se entera que se mea pues es normal, que ya se enterará, poco a poco.
Salí contenta y tranquila, este pediatra siempre me inspira tranquilidad, y nos fuimos a aprovechar el día libre. Bueno, que fue hacer de todo y de nada de lo que quería, como suele pasar, pero con mi hijo, que cada día es más hombrecito, lleva la cesta de ruedas y se para a mirar lo que le interesa y luego me sigue... Aunque cuando ya terminábamos se puso tontito, tocándolo todo y marchándose, uf! estaba para pagar y se iba, cogiéndole como podía!! quien me viese en ese momento pensaría : "mira esa madre como agarra al niño, que histérica!" o vete tu a saber, porque no veáis qué situación, claro, qué haces? tiras el dinero y corres detrás? y la compra? al final, se fue! sí, sí, por suerte, no muy lejos y vi hacía donde: el chu chu (trenecito de esos de meter monedas) le intenté explicar que no se puede marchar, no suele hacerlo, pero no deja de ser un niño.
Uf! creo que ya os he aburrido bastante, así que seguiré con el viernes y el finde mañana...

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