Antes de cualquier salida en bicicleta, sobre todo si va a ser de varios días debemos poner a punto nuestra bicicleta por lo que aquí tenéis todos los pasos que tenéis que dar:
- Sustituir las zapatas, los cables y desviadores de freno y la cinta de los cuernos del manillar.
- Revisar el estado de las cubiertas y prever el desgaste que supondrá.
- Revisar la cadena por si hay algún problema en los cambios.
- Desengrasado y lavado de piezas y lubricado a las que proceda.
Para ello deberemos desmontar los cables de freno y desviadores, la dirección, el sillín, los pedales, las ruedas, las pinzas de freno y la transmisión. De esta forma, tendremos por un lado todas estas piezas y por el otro el cuadro.
Una vez que tenemos todo esto realizado procedemos a densegrasar las piezas como la cadena, los desviadores, el extremo de la tija del sillín y del tubo del manillar. Los pedales normalmente no hace falta engrasarlo pero depende del modelo. A continuación, limpiamos todas las piezas.
A veces puede ser necesario desmontar el juego de dirección, desengrasarlo, limpiarlo y re-engrasarlo, o incluso cambiarlo, pero esto ya depende de cada bicicleta y del conocimiento que tengáis del montaje y desmontaje de ella.
Con todas estas acciones notaréis como se han podido ir eliminando toda clase de ruidos, habremos identificado algunos problemas o posibles averías y habremos asegurado la bicicleta para realizar muchos kilómetros seguidos.
Y ya sólo queda que vayáis con precaución con todo el equipamiento que necesitáis del cual hemos hablado en artículos anteriores y que disfrutéis de la ruta.