Ningún proceso de mejora sirve demasiado si no hay una revisión detrás. Comprobar si se están cumpliendo los planes, los plazos y las previsiones permite corregir el rumbo y tomar nuevas decisiones en caso necesario.
Tal vez recuerdes que el 19 de enero publiqué unos objetivos a nivel personal y vocacional, así como unos sistemas/planes de acción para lograrlos.
¿El motivo? Que mi compromiso con ellos no se me escurriera. Como dirían algunos, quería que hubiese algo que me obligase a rendir cuentas… Y de aquí que lo hayas conocido tú y otros 600 lectores el primer día.
Otras personas han seguido este ejemplo y me han pedido sugerencias de planes para transformar su año, a lo cual voy a dar respuesta citando ciertas obras que me están dando muy buenas ideas. Hoy lo limitaré a una recomendación, pero en el futuro haré más.
Entremos en faena, para cumplir con la transparencia que me impuse.
Revisión de los objetivos
Estoy cumpliendo la mayoría de lo que me propuse antes de lo que pensaba.
Dentro de mis objetivos distinguía (como ya he comentado) entre personales y vocacionales. Esto es así por darle un poco de distinción, aunque todo se relaciona. Por ejemplo, he dejado de desvelarme para escribir de madrugada y he cambiado otras costumbres.
Personalmente, en busca de mejorar mi salud, propuse estos cuatro:
- Descansar mejor entre semana. Aunque no dejé ningún detalle al respecto, por ahora mi semana va del lunes al jueves. No tengo que cumplir ante nada ni nadie los viernes, a no ser que yo lo decida así o que haya emplazado algún curso o sesión de mentoring.
Estoy cumpliendo bastante bien con este, dentro de la situación que tengo en casa: en mi familia hay personas muy ruidosas; por otro lado, la disciplina rigurosa en horarios es imposible con una persona mayor y enferma (de alzheimer y con diabetes, obesidad y otros padecimientos). Esto suele crear mal ambiente en casa, y yo suelo resolverlo encerrándome en mis deberes y en mis placeres. Y si hace falta, tiro una bomba de humo y desaparezco a lo ninja. En cuanto al dormir suficiente… He recurrido al delicioso arte de las siestas en cualquier momento, y si algún día he dormido menos de lo que siento necesario, mi propio cuerpo lo compensa durmiéndome mientras viajo en autobús.
- Recuperarme de mi lesión de la rodilla. Aquí tampoco he sido muy explícito sobre el tipo de lesión que tengo. Es una rotura parcial aguda del ligamento cruzado anterior. También tengo afectados los meniscos interno y externo.
Aunque llevo años con problemas y molestias (ya estuve con medicación para el cartílago, por ejemplo), mi condición física ha sido suficiente para evitar males mayores. De todas formas, me estoy planteando seriamente cambiar mis hábitos deportivos para reacondicionar y fortalecer mis piernas en general, y los cuádriceps en especial. Retomar la bicicleta como hábito (y no limitarme a usarla como transporte durante el verano) es un buen comienzo.
¿Estoy cumpliendo? Bueno, en cierto modo. Me concedieron 15 sesiones de fisioterapia como rehabilitación, y mantener el plan de entrenamiento (amén de pedir otras directrices para cuando acabe) seguramente ayuda. Sin embargo, ahora mismo tengo los meniscos inflamados y a veces termino cojeando porque me duele la rodilla sin más (en especial si he descansado poco o mal; una relación en la que me fijé el año pasado). Es posible que me terminen operando, si la terapia falla en su propósito. Ya me lo dirán desde rehabilitación y traumatología. Personalmente, empiezo a preguntarme si me estoy extralimitando más de lo que es sano… Y qué otras cosas me están afectando tanto como para estar así.
Si no recuerdo mal, algunas propuestas sobre cómo se manifiestan los trastornos en forma de dolores físicos indican que el dolor de las rodillas se debe a soportar cargas excesivas, bloquear emociones y ser inflexible. Lo veo justificable cuando me colma especialmente la situación de mi casa y mi núcleo familiar (y en el pasado llegaron a dolerme las dos rodillas, no sólo la derecha como ocurre ahora). Me hace preguntarme qué cosas temo, y ante qué tengo que (o siento que debo) aguantar y no dejarme arrastrar.
Por lo pronto he abandonado el deporte de alto impacto (aunque volveré tan pronto como me recupere y en la medida que me lo permita el cuerpo) y también estoy trabajando por liberarme de las cargas, ajenas o propias, que puedan estarme llevando a eso.
- No suspender ninguna asignatura este curso. Matriculado en la universidad y con cinco asignaturas nuevas cada cuatrimestre, no parece difícil cumplir esto… ¿Verdad? Pues llega a serlo. Hemos tenido problemas y desvelos durante el primer cuatrimestre de este curso. La mayoría de mis compañeros (y yo mismo) tenemos suspensa una asignatura y la llevamos a septiembre. Otros puede que tengan algún suspenso más, pero en mi caso, ese es el único por ahora, y a falta de terminar el segundo cuatrimestre y las recuperaciones (no creo que suspenda otra, pero nunca se sabe).
Este objetivo es importante para mí porque, a no ser que la cosa mejore (sustancialmente), necesito la beca. Así de sencillo, en pocas palabras. Por ello, tengo que mantener los mínimos de exigencia para recibir cuanta más ayuda, mejor. No puedo cargar esto a mi familia.
El abono de transporte ya me cuesta 80 euros y pronto subirá a 110 o por ahí, a no ser que haga el chanchullo que ya le he visto a alguien de seguir usando el abono joven estando éste caducado. Aquello justifica el objetivo vocacional nº 3 (el de ganar entre 20.000 y 50.000 euros en bruto con mis proyectos), que por ahora está más bien lejos de cumplirse.
De ahí que me haya puesto en serio también con el proyecto y esté moviendo iniciativas para convertirlo en una fuente de valor como hay pocas en este país (y si me apuras, en el mundo). No puedo confiar tanto en la Administración como para no mover los cojones, como diría mi abuelo. Más adelante abundaré en un par de cuestiones sobre esto que podrían interesarte.
- Viajar más. Por ahora, mi único viaje lo hago a diario para estudiar, para quedar con gente y cumplir con el proyecto (y es un desplazamiento pendular a Madrid y vuelta). En cuanto al viaje por placer… Es posible que aproveche para escaparme a las Fallas de Valencia, al Bando de la Huerta de Murcia (o a otro evento de las Fiestas de Primavera) y algún otro lugar y acontecimiento señalado.
Con esto cerraría los aspectos personales que estoy trabajando, pero en vista de que voy cumpliendo más o menos bien, añadiremos algo:
- Cuidar y variar mi alimentación.
- Retomar las largas caminatas (sin forzar la pierna).
- Pasar más tiempo con mi gente, y conocer nuevas personas.
Suficiente por ahora. Calidad y cumplimiento por encima de calidad.
En cuanto a los aspectos vocacionales, me había planteado:
- Convertir La Vida es Fluir en un proyecto de referencia y único en su especie. Por ahora, este proyecto ha evolucionado de sus comienzos como una crítica y propuesta alternativa a los despropósitos de las industrias de autoayuda y de ligue a una propuesta multidisciplinar y holística para el bienestar personal. ¿Cómo ha ocurrido? Por tendencia natural. Se trabajan aspectos de aprendizaje, comunicación, estilo de vida, mentalidad y relaciones.
Tras esta primera gran evolución en el planteamiento, surgió la creación de un equipo de colaboradores para el proyecto. Ese era el objetivo vocacional nº 2, que como se ha cumplido sobradamente no voy a detallar aquí (si te tienta la curiosidad saber quién entró al equipo, tienes los apartados “Conócenos” y “Nuestros cursos”, aunque no estamos todos).
La segunda gran evolución la estoy viendo con el desarrollo de mi trayectoria vocacional: en el ámbito de la pedagogía, me decanto especialmente por la orientación; lo que conlleva que a este proyecto decida darle todavía más de ese matiz de apoyo personal. Tanto yo mismo como mis acompañantes en el proyecto somos expertos en nuestro campo, y combinamos todos ellos para ofrecer una experiencia única en España (hasta que otros vean el potencial de la misma y tomen ejemplo, lo cual me halagaría mucho y me incitaría a mejorar lo presente).
- Hacer algo tan grande que me sobreviviera y no dependiese de mí. Así era el cuarto objetivo. La mejor manera que se me ocurrió fue convertirme en un emprendedor social. Por mi curiosidad latente (y mi deseo de cumplir con este objetivo) me puse en contacto con una responsable de Ashoka Spain (la rama en España de un proyecto de emprendimiento social).
Desde Ashoka hicieron circular una campaña para presentar ante el Senado siete propuestas de emprendimiento social que generan empleo y capacitan a las personas, además de aportarles valor y poder personal. Reservé mi escaño junto a Sergio Cuesta (un miembro del equipo LVEF), pues ambos tenemos interés en apoyar y replicar la propuesta de la Lanzadera de Empleo, que es la que más casa con nuestros proyectos y capacidades.
¿En qué consiste una Lanzadera de Empleo?
Según el emprendedor social que la propone, se trata de organizar grupos de personas (preferentemente dinámicas y activas) con interés en incorporarse al mercado laboral. Estos grupos son entonces coordinados y asistidos por uno o varios coaches, que ayudan a sus miembros a desarrollar competencias y suelen desembocar en la obtención de empleo por cuenta propia o ajena.
Si has estado presente en mis programas anteriores o sabes algo sobre ellos, e incluso sobre el actual… Entonces, tal vez te suene la dinámica grupal de la Lanzadera. ¿También a ti te parece una tendencia natural de crecimiento que apoye y replique esta propuesta?
Para terminar
Antes prometí que citaría un par de obras que me están ayudando bastante. Aquí las tienes. Ten en cuenta que son enlaces de afiliado, con lo que si las compras aquí me estás ayudando a mantener el blog en activo y a cumplir mis objetivos económicos.
- Por qué necesitas un Coach, de Juan Carlos Cubeiro. Es un compendio bastante bueno de lo que se puede hacer en un proceso de coaching. Encadena magistralmente una propuesta articulada en anticipar el futuro, explicar el pasado y obtener el presente (a grandes rasgos, aunque incluye más cuestiones) aportando múltiples y valiosas referencias al trabajo de otras personas. Si odias los libros plagados de citas que invitan a reflexionar (extraídas de todas las fuentes imaginables) evítalo. Si te atreves a comprometerte contigo y no sabes por dónde comenzar, consíguelo.
Yo lo voy a usar como material de ampliación y apoyo en mis cursos y en la Lanzadera. Supongo que eso te dará una idea de la utilidad y el atractivo que tiene.
- Si un solo libro te sabe a poco, visita los materiales que recomiendo desde el principio de LVEF. Algunos son más que conocidos, y otros es posible que te pillen de nuevas. Comentamos cualquiera de ellos si quieres.
Aquí termina la revisión del primer bimestre de 2015.
Repetiré a principios de mayo para comentarte cómo avanza todo lo que he planteado hasta ahora. Si te interesan las actividades propuestas o quieres participar en la Lanzadera de Empleo, ponte en contacto conmigo y lo haremos funcionar.
Gracias por el apoyo (directo e indirecto) para cumplir estos objetivos.
Cualquier sugerencia o aporte que quieras hacerme, puedes dejar constancia en los comentarios.
Autor: Sergio Melich (Kheldar)
Pedagogo al 36,5% y subiendo, comunicador y mentor por vocación (y pronto, más). Autor de las webs La Vida es Fluir & Play it Sexy!, Aventurero y Heartist (persona comprometida a vivir, crear y obrar con cabeza, corazón y conciencia). Escribo sobre el Buen Vivir: autoaprendizaje, estilo de vida, habilidades sociales, relaciones y más.