Londres es sin duda la ciudad del mundo que más veces he visitado, después de Madrid. He estado en Londres cinco veces, una de ellas viviendo durante seis meses, más otras tantas veces de paso por su aeropuerto para conexiones a vuelos en algunos de mis viajes a países lejanos. Yo además soy de las que no se conforma con conocer cuatro lugares turísticos, sino que me gusta recorrer a fondo una ciudad si tengo el tiempo suficiente para hacerlo. La vez que viví en Londres seis meses, me aventuré a lugares menos turísticos y conocidos, que además me sorprendieron gratamente. Algo que me encanta de Londres es que a pesar de ser una gran ciudad con muchos edificios, mucho tráfico y mucho estrés, también nos deleita con numerosos espacios verdes repartidos por todo su territorio. Y no sólo me refiero a los típicos parques del centro que todo el mundo conoce, sino también a otros de las afueras que son enormes bosques con lagos, y a los que se puede llegar fácilmente en transporte público.
La última vez que estuve en Londres fue hace no mucho, en agosto del 2014, y me quedé una semana en total. Aproveché para reencontrarme con algunos amigos y recorrer algunos de mis lugares favoritos de la ciudad. Aunque ya haya decidido que Londres no es el lugar donde me quedaría a vivir, reconozco que para visitar es una ciudad que me fascina. Tuve suerte porque durante esos días me quedé en casa de una amiga que vive en pleno centro, muy cerca de Oxford Street. Me vino genial para recorrer algunos de mis lugares favoritos del centro, además de ahorrarme dinero en transporte, pues dicho sea de paso, el transporte público en Londres es muy caro, uno de los más caros del mundo. Si no hubiera tenido donde quedarme, habría consultado la web de venere, donde hay amplia oferta de alojamiento con precios para todos los bolsillos. A continuación me gustaría hablaros de algunos de los sitios que revisité durante esta semana que pasé en Londres.
Comencé caminando desde Oxford Circus hacia Picadilly Circus, a través de la larga Regent Street. Esta es la tercera vez que hago esta caminata, muy especial para mi porque fue uno de los primeros sitios que recorrí en Londres la primera vez que estuve, en el primer día. De esto hablo en uno de mis posts sobre el centro de Londres que escribí en el 2012, cuando vivía aquí. En ese post también hablo de muchos otros lugares del centro que visité aquel verano, un post que es continuación de otro sobre el centro de Londres que escribí en primavera. La verdad que entre los dos posts di un repaso muy completo de todo lo que se puede visitar en el centro de esta ciudad.
Yo como soy muy fan de los parques, y es lo que más visito cuando voy a una ciudad, en ese post hablaba de todos los parques del centro ya que todos los visité. Esta última vez revisité dos de los parques, que además son mis favoritos: St. James’s Park y Regent’s Park. El primero tiene una extensión de 23 ha en la zona de Westminster y es el más antiguo de los Parque Reales. El parque tiene un lago pequeño, el St. James-Park’s Lake, con dos islas, Duck Island (llamado así debido a la colección de patos del lago), y West Island. Un puente que cruza el lago ofrece las vistas del Palacio de Buckingham y del edifico principal de la Foreign and Commonwealth Office.
Regent’s Park es otro de los parques reales y tiene una superfercie de 2 Km². Está compuesto principalmente por zonas verdes abiertas con jardines, un lago con aves acuáticas y un área para botes, campos de deporte y zonas infantiles. El extremo nordeste del parque alberga el London zoo, el zoológico más antiguo del mundo. El parque tiene una ronda exterior llamada el Outer Circle (4,3 km) y una ronda interior llamada el Inner Circle, que rodea el área más cuidada del parque, Queen Mary’s Gardens.
En el límite norte se encuentra el Regent’s Canal que conecta el Grand Union Canal con los London Docks, el antiguo puerto de Londres. Precisamente por el Regent’s Canal estuve también caminando hasta Camden Town, otra de mis zonas favoritas de Londres. La verdad que caminar o ir en bici junto al canal es una maravilla, algo que hice en algunas ocasiones cuando vivía en Londres.
Al igual que hiciera entonces, esta vez también terminé la caminata en el animado mercado de Camden, donde aproveché para comer en uno de sus numerosos puestos de comida internacional. Fui un domingo, uno de los días que más animado está el mercado, especialmente a la hora del almuerzo.
En cuanto a museos de Londres, esta vez sólo revisité uno, que además es mi favorito (junto con el de historia natural): British Museum. Este museo sólo lo vi en mi primera visita a Londres, y aunque quise volver en otras ocasiones, al final nunca tenía tiempo. Esta vez no tenía excusa, mi amiga vivía a sólo 10 minutos a pie del museo, así que decidí volver. Aunque la sala más popular de todas es la dedicada a los egipcios, tengo que decir que la de América también me encanta (los que seguís mi blog sabéis la predilección que tengo por este continente).
Esto ha sido todo, un breve repaso por algunos de los lugares de Londres que revisité en esta última ocasión. Aunque también pasé por la City y Westminster, no me entretuve demasiado, y de ellos ya cuento mucho en otros posts de mi blog. Por cierto, si tenéis interés en leer los posts que escribí mientras vivía en Londres en el 2012, haced clic aquí. Espero que os sean de utilidad si venís a Londres y sobre todo que os anime a hacerlo.