Super Pop
Una de las publicaciones más populares y famosas de los 80 y, especialmente, de los 90, entre los adolescentes fue la Super Pop.
Con un perfil muy enfocado al mundo de la música, cine y televisión, se hizo tremendamente popular entre los jóvenes de la época por las noticias de actualidad en estos ámbitos y, especialmente, por los posters gigantes que solía regalar con sus números y que, habitualmente, decoraban las habitaciones de la muchachada.
Su culmen lo vivió en la década de los 90, vendiendo alrededor del millón de ejemplares por número, momento en el cual aprovechó para introducir otro tipo de temas interesantes para su público como tecnología, sexo o deportes.
Con el cambio de milenio sus ventas comenzaron a caer en picado, justo con el auge de internet y el hecho de que su público ya había crecido y dejó de interesarse por el contenido de la revista. La primera década del 2000 fue un auténtico calvario para la publicación, decidiendo en 2011 cesar su publicación en papel y centrarse en el canal online. A día de hoy todavía se mantiene, pero ni mucho menos alcanza la cotas de popularidad de antaño.
Ragazza
Ragazza fue una de las publicaciones clave dirigidas a un público adolescente exclusivamente femenino. Nació en 1989 de la mano de Hachette Filipacchi y, como acabamos de decir, todo su contenido giraba en torno a las chicas adolescentes de la época.
De periodicidad mensual, trataba temas como moda, eventos, música, sexo, relaciones sociales, viajes, etc. Poco a poco, siguiendo el éxito y la tendencia marcada por publicaciones como Super Pop, se fue centrando más en secciones muy propias de adolescentes como consejos para ligar, consultorios sexuales, fotos de actores sin camiseta, secciones de autoayuda, etc.
Como sucedió con este tipo de publicaciones, Ragazza no pudo resistir el cambio de tendencia en el público adolescente ni la consolidación de internet, por lo que en 2008 cesó su publicación.
Teleindiscreta
Una de las publicaciones más míticas enfocadas al mundo de la TV fue, junto conTP, Teleindiscreta. Esta revista nació en 1984, si bien en ese momento se denominó Indiscreta y se enfocó casi exclusivamente al mundo del famoseo y del corazón, aunque con un estilo más informal y desenfadado. Este formato no duró demasiado, ya que no tuvo demasiado éxito y, un año más tarde, se decidió renovarlo, centrarlo en el mundo de la televisión y cambiar el nombre por Teleindiscreta.
De esta forma, a partir de 1985 la publicación se centró en las parrillas de las entonces dos únicas cadenas de televisión, TVE-1 y TVE-2, desarrollando los contenidos de las mismas, comentando sus programas y series, reportajes de actores y presentadores, etc. Además, fue también bastante popular por los posters, coleccionables y pegatinas que regalaban con sus números. Lógicamente, con el pasar de los años y la proliferación de las cadenas privadas y autonómicas, la revista fue cada vez más amplia, pero con menos capacidad para desarrollar demasiado sus contenidos, debido a la gran cantidad de ellos.
Sin duda lo anterior supuso el lento pero inexorable declive de la revista que se fraguó desde 1994 y, muy especialmente, con el nuevo milenio. La ingente cantidad de programas, así como cadenas (lo cual no hizo más que aumentar), fue haciendo imposible centrarse en profundidad en ninguno de ellos. Asimismo, a finales de los 90 irrumpieron con fuerza las revistas del corazón más sensacionalistas, lo cual le quitó bastante mercado. La puntilla final, como sucedió con casi todas las publicaciones, vino por parte de internet, lo cual hizo casi inservible este formato en papel. Desgraciadamente, Teleindiscreta cerró en 2008.