Reyes Montiel, el azote de Ezperanza de Aguirre

Mientras Esperanza Aguirre sale en defensa de Fernando Sánchez Dragó, al que compara con García Márquez, Henry Miller y Jaime Gil de Biedma en un alarde no sé si de prepotencia, machismo o simplemente estupidez, Reyes Montiel, diputada autonómica de Izquierda Unida-Madrid,  hace pública su renuncia al escaño que ostenta en la Asamblea de la Comunidad autónoma y anuncia, al mismo tiempo, su decisión de abandonar esta formación política. Siempre que leo en la prensa informaciones sobre presuntos casos de corrupción que salpican al Gobierno de  Esperanza Aguirre, un día sí y otro también,  viene a mi memoria la figura de Reyes Montiel, y sólo puedo lamentar que ya no milite en las filas de Izquierda Unida. 

Ha sido, en los últimos siete años, la diputada más combativa contra los abusos cometidos por el Partido Popular en la Comunidad de Madrid.  Portavoz de Izquierda Unida en la Comisión de Vigilancia de las Contrataciones ha denunciado sin descanso las prácticas presuntamente corruptas llevadas a cabo desde el Gobierno de Esperanza Aguirre, que nadie se explica aún cómo puede esquivar todas las pruebas que se acumulan en relación con la trama Gürtel y el caso Fundescam. La presidenta de la Comunidad de Madrid respirará, sin duda alguna,  más tranquila sin la presión de Reyes Montiel, pero Izquierda Unida pierde una buena diputada,  una gran persona y un referente de transparencia, ética y honradez.  Una pena.

Hoy no es un buen día para la izquierda.  Marcelino Camacho murió ayer en Madrid,  a los 92 años de edad. Desde estre blog quiero trasladar todo mi apoyo a su familia, a sus amigos y a sus compañeros de CC.OO. Tuve la suerte de conocerle personalmente y puedo dar fe de que fue siempre un hombre comprometido con la democracia, la libertad, la igualdad y los derechos de los trabajadores.  Fundador y secretario general de CC.OO, representó también al PCE en el Congreso de los Diputados en los primeros años de la transición.  La izquierda tiene que buscar sus raíces en gentes como Marcelino Camacho, de las que debemos aprender el valor de la integridad, la coherencia y el orgullo de hacer frente a los abusos y atropellos de la derecha económica y social. Marcelino, Agur eta Ohore.   

Os adjunto un enlace a un artículo de opinión, escrito por Manuel Rico en el diario Público, referente a Reyes Montiel, una buen amiga, a la que deseo lo mejor en esta nueva etapa de su vida.  Es sólo una llamada a la reflexión.

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