En primer lugar, creo que hay que decir que esto en cualquier otro lugar hubiera sido simplemente anecdótico. Sin embargo, lo indignante es que se produzca en una iglesia católica. Dudo muchísimo que hubiera tenido lugar en un centro religioso de otro credo, por ejemplo en una mezquita. Por supuesto, la responsabilidad es de la parroquia, porque el acto dista mucho de ser una reunión ecuménica seria. Con el video entenderéis lo que quiero decir:
(Si el vídeo no funciona, está en el enlace de la noticia)