Revista Filosofía
La semana de la Filosofía en la UAN
César Ricardo Luque Santana
En el marco del Día Internacional de la Filosofía instituido por la UNESCO desde el 2002, mismo que se celebra en todo el mundo durante la tercera semana de noviembre, el Programa Académico de Filosofía (PAF) de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN) realizó por cuarta ocasión consecutiva (desde el 2006 si mal no recuerdo), una serie de actividades para esta conmemoración consistentes en dos conferencias, dos presentaciones de libros y un panel de profesores de la carrera de filosofía. Estas jornadas se realizaron durante los días 23, 24 y 25 de noviembre del presente año.
En la primera actividad se presentó el libro de la Dra. Lourdes Pacheco “El sexo en la ciencia”, mismo que fue comentado por la Dra. Yolanda Cadenas Gómez, ambas investigadoras del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y profesoras de la licenciatura en filosofía de la UAN. Dicha obra está publicada en coedición por Plaza y Valdés y UAN. La segunda actividad consistió en un panel integrado por un grupo de profesores de filosofía, a saber, los Maestros Ángel González, Cecilia Licea, José Luis Olimón y Ricardo Luque, fungiendo como moderador de esta mesa el también Maestro Pedro García. La tercera y última jornada se desarrolló con una conferencia magistral del Dr. Fernando Leal Carretero, profesor-investigador de la facultad de Filosofía de la Universidad de Guadalajara (U de G), seguido de la presentación del libro “Introducción a la teoría de la argumentación”, de la autoría del mismo Fernando Leal y dos colegas suyos.
En la primera jornada, se empezó con un mensaje del Coordinador de Filosofía de la UAN, Lic. Raúl Alamillo Gutiérrez, misma que se puede consultar en el blog "Sapere Aude" (http://hetairos-sapereaude.blogspot.com/), para posteriormente ser inaugurada la semana de la filosofía por la Coordinadora del Área de Ciencias Sociales y Humanidades (ACSyH), Maestra Patricia Ramírez, quien manifestó la importancia que tiene para el ASCyH la consolidación de la carrera de filosofía para fortalecer el pensamiento crítico en ella. Después vino la conferencia de la Dra. Pacheco en torno al mencionado libro de su autoría, para concluir con el comentario del mismo de la Dra. Yolanda Cadenas. El panel por su parte fue una actividad que consistió en que el mencionado grupo de profesores contestó una serie de preguntas que previamente hicieron algunos estudiantes, las cuales recibieron el Comité Organizador quienes a su vez enviaron con anticipación a los profesores para su conocimiento. Por último, se realizó la conferencia del académico invitado para esta ocasión, aunque por razones de salud no pudo asistir de modo que su conferencia fue leída por uno de sus colegas. Luego vino la presentación del libro ya mencionado producido por el Cuerpo Académico de “Retórica, Lógica y Teoría de la Argumentación” del Departamento de Filosofía de la U. de G., una obra de compilación de varios autores coordinada por los Doctores Fernando Leal Carretero, Carlos Fernando Ramírez González y Víctor Manuel Fábila Vega, participando estos dos últimos en la presentación del mismo acompañados por la Maestra Cecilia Licea, profesora de lógica del PAF de la UAN. La clausura corrió a cargo del Maestro Rafael Hernández Navarrete, Director Administrativo del ASCyH, quien agradeció a los visitantes por su participación haciendo votos por continuar y profundizar las relaciones entre ambas instituciones, al mismo tiempo que reconoció el esfuerzo de la comunidad de filosofía para llevar al cabo estas jornadas que dijo, son de gran provecho para los estudiantes y profesores de esta licenciatura.
Resulta difícil documentar cada actividad, pero trataré de ir presentando posteriormente algunas de ellas en el blog “Sapere Aude” ya mencionado. En cuanto al panel, algunas de las preguntas giraron en torno a la crítica a la metafísica por parte de la filosofía analítica, la relación entre filosofía y religión, sobre cuáles son los problemas filosóficos más importantes en la actualidad, entre otras inquietudes, pero por lo pronto me limito a presentar mi participación en el panel en una de sus preguntas, la cual dice así: “¿Cuál es la aportación (si es que hay) que Marx hace a la filosofía? una vez que se le considera a Marx a partir de sus obras de madurez”.
La tesis del Marx maduro como el verdadero Marx o el Marx científico es una tesis superada que en algún tiempo esgrimió el filósofo francés Louis Althusser. Sin embargo, las ideas filosóficas de Marx que causaron un mayor impacto fueron sus escritos de juventud, particularmente “Los manuscritos económico-filosóficos de 1844”. No significa por tanto que sea válida la postura de un Marx filósofo o de juventud versus un Marx científico o maduro, pues “El capital” contiene desde luego elementos filosóficos y una perspectiva filosófica, además de que proporciona un criterio metodológico materialista para entender las ideas filosóficas.
La aportación de Marx a la filosofía sería para mí, la crítica que esgrime al capitalismo como fuente de injusticias donde la filosofía se justifica como una forma de pensamiento que tiene la función de desenmascarar todas las formas de opresión existentes y busca la liberación del hombre no sólo en el plano de su conciencia sino transformando su entorno social para construir una comunidad orientada a superar "el reino de la necesidad por el reino de la libertad". Por ello afirma en su famosa “Tesis Once sobre Feurbecah” que los filósofos se han limitado a interpretar al mundo cuando de lo que se trata es de transformarlo, lo que no significa abandonar o cancelar la filosofía sino asumirla como crítica social o cultural contra toda forma de opresión y enajenación. Por ello sostiene que “no podéis suprimir la filosofía sin realizarla”. Es importante por último rechazar también la idea de Althusser de la filosofía como una arma de la revolución porque al dotarle esta función instrumentalista, la reduce al servicio de una ideología que en sí misma es compleja y contradictoria, al mismo tiempo que conduce la filosofía del pensamiento marxista a un dogmatismo con sus consabidas nefastas consecuencias, a saber, una carencia manifiesta de poder analítico para comprender al mundo que se quiere transformar y como una postura infranqueable que descalifica otras muchas perspectivas válidas incurriendo en una soberbia injustificada, negando la necesidad de diálogo con otras posturas para aprender de ellas reapropiándose de algunos de sus planteamientos dentro de la propia perspectiva, y al mismo tiempo, someter sus asertos al escrutinio público para ser congruentes con la dialéctica y con la máxima de Gramsci de que “sólo la verdad es revolucionaria”.