El pasado 8 de marzo nos dejaba, a los 44 años, Mike Starr, bajista original de Alice in Chains, el último en la larga lista de muertos del Grunge (Andrew Wood, Kurt Cobain, Kristen Pfaff y Layne Staley).
Mike apareció muerto en su casa de Salt Lake City (Utah) y los motivos, aunque aún no se conocen, podrían estar relacionados con una sobredosis, lo cual, a pesar de su conocida afición a las drogas, no deja de sorprender teniendo en cuenta que hacia tiempo que estaba intentando “limpiarse”. De hecho, Mike fue uno de los participantes del reality estadounidense Celebrity Rehab, donde diversos famosos intentaban dejar sus adicciones.
Starr fue el bajista original de Alice in Chains, desde el año 1987 hasta 1993. Participó, por tanto, en los tres primeros, y más exitosos, álbumes de la banda de Seattle: Facelift, Sap y Dirt. Los motivos de su marcha nunca fueron claros, algunos dicen que él mismo abandonó agotado por las largas giras, mientras que otros afirman que fue expulsado por su afición a la heroína (lo cual para mi sería bastante curioso teniendo en cuenta que Staley también sufría esa adicción…). Fue sustituido por Mike Inez (Jar of Flies, Alice in Chains, Mtv Unplugged y Black Gives Way to Blue).
Posteriormente, tocó en el grupo Sun Red Sun, junto a Ray Gillen y Bobby Rondinelli de Black Sabbath.
En 2002 recibió un durísimo golpe tras la muerte de su amigo y voz de Alice in Chains, Layne Staley, el otro gran icono del Grunge junto a Kurt Cobain. Todo esto sumió a Mike en una profunda depresión. De hecho, Mike se opuso a que Alice in Chains se volviera a juntar con un nuevo cantante (William DuWall), afirmando que “Layne es Alice” y que el grupo debería haberse llamado “la banda de Jerry Cantrell con artistas invitados“.
Hace unas semanas se supo que iba a pasar a formar parte de Days of the New junto a su amigo Travis Meeks, pero por desgracia ya nunca veremos el resultado de su colaboración…
El último mensaje en su buzón de voz decía: “Necesito drogas, estoy mal“.
Descansa en paz Mike, los fans del Grunge no te olvidamos.