Revista Cultura y Ocio
He elegido la imagen de las impresionantes columnas del templo romano que se conservan en el Carrer del Paradis, en Barcelona, por una doble razón: La primera porque a finales de los años 90 visité la capital catalana y, creo recordar que, camino de la sede de la Gran Logia Simbólica en el Carrer d´Avinyó, me llevaron allí. Me encontré dentro del patio de un edificio con algo inimaginable. La segunda, porque he aguardado a que un Blog que sigo habitualmente, El Masón Aprendiz, publicara algo que esperaba con cierta impaciencia y que, metafóricamente, simbólicamente dirán otros, tiene mucho que ver con el asentamiento de unas robustas columnas. Ya lo ha hecho y lo reproduzco textualmente más abajo.
El Gran Consejo General de España del Rito Francés ya es una realidad desde el día de ayer.
Me alegro por el Gran Oriente de Francia y por la Gran Logia Simbólica Española, pues fruto de la colaboración entre estas dos más que representativas obediencias masónicas, liberales y adogmáticas, en nuestro país ve la luz algo anhelado y diferente; algo que nace teniendo presente la idea del respeto a otras sensibilidades y, evidentemente, mostrando que , trabajo , humildad y discreción han de ir de la mano en esta particular dimensión de la vida que es la experiencia masónica.
Texto publicado por el Blog "El Masón Aprendiz"
Ayer, día 29 de octubre el “Gran Consejo General (Rito Francés) del Gran Oriente de Francia” constituyó, mediante entrega de Carta Patente, el “Gran Consejo General de España”; Quedando, bajo esta Regularidad, instituidos los “Ordenes de Sabiduría” o Altos Grados del Rito Francés en territorio español.
El Acto tuvo lugar en el Templo Masónico “V.·.M.·. Francisco Ramos Molins” sito en el Ateneo Cultural Minerva de Barcelona, siendo presidido por el “Très Sage et Parfait Grand Vénérable” Jean Pierre Català, asistido por su Colegio de Oficiales. Se nombró “Muy Sabio y Perfecto Gran Venerable” de este Gran Capítulo al H.·. Manuel Mor y fue instalado su Colegio de Grandes Oficiales.
Et si omnes, ego non.