Por más rápido que vayamos por las mañanas cuando nos despertamos para ir a trabajar, todos inevitablemente tenemos nuestros pequeños - grandes rituales.
Yo me he acostumbrado a levantarme antes para poder comenzar el día con calma (dentro de las posibilidades) y tomarme sentada en la mesa del salón, la que para mi es mi comida preferida: el desayuno.
Tengo la suerte de entrar a trabajar a las 9 y la oficina no se encuentra demasiado lejos de casa por lo que saliendo unos 10 minutos antes, puedo llegar a la hora al trabajo. Eso me permite iniciar el día de un modo más relajado, sin tantas prisas, sin tanta presión. Para mi es muy importante esto porqué levantarnos con estrés, prisas y presiones... Puede desestabilizarnos todo el día.
En mi caso, tras despertarme, cepillarme los dientes y tomarme un vaso de agua tibia con limón (otros días con una cucharada de vinagre de manzana u otras simplemente agua tibia), dedico siempre unos minutos a repetir una serie de ejercicios de yoga (suelo hacer una serie de repeticiones de saludos al sol). Tras esto escojo la ropa que me pondré, me cambio acompañada de las noticias de fondo y me preparo el batido verde, una taza de té y el bol de cereales con leche de avena (esto no lo perdono nunca).
¿Cuáles son vuestras rutinas por las mañanas? ¿O sois de los que salís escopeteados al trabajo sin desayunar, quizá con sólo un café en el cuerpo?
Fotos: Anna Alfaro
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