Kyklo los tiene cuadrados.
Se han ventilado el encarcelamiento de Kyklo con demasiada rapidez, me esperaba que se hubiese desarrollado la situación mucho más (no sé, algún enfrentamiento político o entre las secciones del ejército, ya que el capitán del cuerpo de exploración está interesado en él). Lo bueno es que por lo menos aparece Cardina, un personaje que tiene pinta que vamos a ver bastante en la historia dada su procedencia.Por lo demás, la historia sigue avanzando muy lento, con cada tomo da algún paso, pero de hormiga. Curiosamente, en este manga esto no me importa demasiado, lo poco que avanza me llega para calmar mis ansias de saber, y por otro lado, hay mucha acción. Kyklo se está haciendo un experto en enfrentarse a los titanes... a pié y tan solo con una daga o-o. Algo que atemorizaría a cualquier otro ser humano, él lo hace con una soltura pasmosa, da gusto ver las escenas de acción en estos enfrentamientos.Además, se vuelve a hablar del dispositivo de desplazamiento que se utiliza en el manga original para atacar de una forma más efectiva a los titanes. Es curioso como aquí es un secreto y casi nadie sabe de su existencia (y mucho menos utilizarlo), algo que es tan esencial en el universo de "Ataque a los Titanes", en la época de Kyklo es poco más que un prototipo. Sin este utensilio la humanidad estaba muy jodida, me está gustando mucho el cómo van dejando pequeñas perlas sobre dicho objeto, es posible que el protagonista tenga una relación muy importante con él y eso le da un punto de interés extra a la trama.Un buen tomo, se lee muy rápido y es entretenido. Espero que la historia vaya por donde yo creo xp.Revista Libros
En el Exterior