Revista Libros
El cónsul Cicerón, republicano convencido, tiene poderosos enemigos dispuestos a acabar con él. Uno de ellos se llama César…
Año 63 a. C. Cicerón ha sido nombrado cónsul de Roma, el cargo más alto de la República, tras una ascensión turbulenta que le ha granjeado los peores enemigos. Así, su política se ve condicionada por las intrigas y conspiraciones a su alrededor, que convierten la capital del Imperio en un verdadero laberinto de poder.
En semejante escenario, Cicerón debe enfrentarse a Julio César, un joven líder que busca el favor del vulgo, y a Catilina, un personaje sibilino y maquiavélico. Son años de disputas, complots y ambiciones desmedidas que marcarán el rumbo de Roma e inscribirán el nombre de sus protagonistas en la Historia.
Sin embargo, César, que logra salir indemne de la conspiración, se alía con Craso y con el triunfador general Pompeyo para neutralizar el Senado. La República tiene los días contados, y Cicerón, forzado al exilio, dispone de un solo día para abandonarlo todo y salvar su vida.Aquí