Esta semana teníamos pensado hacer una entrada sobre un disco que nos lleva rondando la cabeza mucho tiempo, pero mira por dónde este último fin de semana el amor de mi vida realizó uno de sus numerosos e incontables prodigios y me llevó, sin esperármelo, aquí mismito:
El paraíso.El hogar. El tío Rosendo.
¡Y el maestro John Fogerty!Podría seguir diciendo y añadiendo cosas, palabras, datos... Pero no serviría para nada en absoluto, pues lo vivido fue simple y llanamente indescriptible.¡Sorpresitas que te da la vida!