51 Grados y Nonno nos ofrecieron ayer en Rockville un directo muy especial con buenas dosis de rock.
Ante el fin de gira de 51 grados y la propuesta llena de buen sonido de Nonno en la sala Rockville, nos encontramos con dos buenos directos que merecen la pena ser recordados ante el futuro.
La primera banda de la noche eran Nonno, una de esas formaciones de Madrid que siempre ofrecen y es ue decidieron empezar con Rebelión y así, demostrar que el rock es algo que conocen y que cuentan con la contundencia de la parte de bajo y guitarras, algo que les hace tener un sonido muy especial dado que las guitarras tienen otro sabor y termina de colorear la parte instrumental junto a una parte vocal muy pronunciada. Los siguientes temas eran Piel de león y Esplendor. Con un inicio tan potente de tres canciones como estas, el respetable ya estaba entrada en calor, el siguiente tema era Tierra Quemada y con esta canción, la formación ya entraba en la segunda parte, una segunda parte con Ego y Quién dijo miedo como canciones más especiales de esta parte final. Como colofón, la banda nos demostró que están de vuelta y que el rock que presentan es una realidad.
51 grados por su parte llegaba a la sala en su fin de gira, un concierto de unos 60 minutos nos buenas canciones donde el power trío afincado en Madrid hizo gala de su sonido. Destacar que la actual formación tiene ese toque y pegada que les ha hecho ser una referencia en la escena musical con una potencia basada en el sonido del bajo y la batería junto a la guitarra más afilada que se puede presentar en la escena y una voz con coros que terminan de coronar la capacidad de ofrecer un sonido muy intenso. Para esta noche, el fin de gira de la formación nos demostró que en directo son una verdadera propuesta de alto voltaje.
El concierto empezaría con Requiem para seguir con Estigma y, desde esta propuesta, la banda presentó su sonido más interesante y lleno de furia sonora. Seguirían Redentor y Cometas como los siguientes temas en los que la banda ya estaba comoplétamente engrasada y ya estaba todo listo para la primera sorpresa. Aparecería Fofó (antíguo bajista) en G.P.M.; uno de los temas más afilados de la banda donde apareció una imagen de complicidad de quienes conocemos a la banda desde el pasado. El siguiente tema sería Seguir Aquí donde la banda volvería al pasado, al igual que en Zener y es que quedaba claro que tocarían casi todo lo que han publicado.
El show seguía y era el momento de contar con otro de los invitados, en este caso era Trivi (Rojo 5) aparecería en Déjame para sumar su guitarra y voz en un momento muy especial en el concierto que marcaba la mitad del show. Volverían al disco actual (que estaban despidiendo) con Invencible y es que llegaban casi sin tomar aire y con el tiempo justo para afinar y para ir adentrando a la banda en otra de las sorpresas.
Cabe destacar como el power trío está tan bien compenetrado como para no dejar de mirarse e ir modulando las canciones a la vez que iban disfrutando y esbozando sonrisas (recomendamos ver las fotos).
Llegaba una de las mejores colaboraciones de la noche, en el caso de Tiempo de Héroes aparecerían Iván, Chivi y Mozu que, en el caso de este último se quedaría varios temas más, pero en lo que concierne a esta canción, llegaban con dos timbales para hacer del tema (con muy pocos pases por el local) una especie de canción que tenía más peso en la percusión y donde las guitarras (en especial la de Mozu) llenaban todo el sonido. Bajarían las revoluciones con Destino y con Faro en lo que ya era la recta final del concierto. Para cerrar el show, llamarían a Dani de Nonno para cantar Come together en calidad de cierre junto a Síndrome donde la banda se quedaba sola. Quedaban tres canciones, Huir era el primer tema extra, una canción donde solo veríamos a su cantante con voz y guitarra. Se sumó un tema nuevo que se llama Puzzle y, terminaron con Desconexión como cierre (con todos los asistentes en el escenario).
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